La expresidenta del PSOE, Micaela Navarro, una de las 17 miembros de la ejecutiva que dimitieron el pasado miércoles, defendió ayer que debe ser el Comité Federal y no los militantes quien decida si facilita un gobierno del PP y la línea que debe seguir ahora el partido. "Si hay algo de lo que no nos podemos olvidar es de que hay un órgano que es el Comité Federal, donde están una parte muy importante de compañeros que tienen toda la autoridad para definir cuál es la línea que tiene que seguir el partido", apunta la diputada andaluza.

Tras remarcar que confía "plenamente" en que en el PSOE se aplique su "modelo de democracia representativa", Navarro argumenta que los dirigentes políticos suelen "tener una información más completa de las circunstancias sobre las que se van a pronunciar de la que tiene un militante de base". La expresidenta, que no participó en el Comité Federal del sábado hizo dimitir al secretario general Pedro Sánchez, opina que lo que tienen que tener los militantes son "argumentos para defender lo que hace el partido".

Navarro, que es vicepresidenta segunda de la Mesa del Congreso, rechaza postularse sobre qué debe hacer el PSOE para evitar unas terceras elecciones. "Hay que ser muy prudentes, sobre todo cuando no se tiene la responsabilidad", señaló ante de afirmar que comparte con el presidente de la gestora, Javier Fernández, que "es peor un gobierno en mayoría del PP que uno en minoría".