Toda la oposición en el Congreso ha criticado hoy la ausencia del ministro de Economía, Luis de Guindos, de la comparecencia ante el pleno a la que estaba convocado para dar explicaciones del nombramiento frustrado el exministro de Industria José Manuel Soria para un puesto directivo del Banco Mundial.

El Gobierno ha excusado su asistencia con el mismo argumento ya utilizado en la pasada legislatura, esto es, que un Ejecutivo en funciones no puede someterse al control parlamentario de una Cámara que no le ha dado su confianza.

Ha recordado además que Luis de Guindos ya dio cumplidas explicaciones sobre este caso ante la Comisión de Economía el pasado 13 de septiembre.

Desde el PSOE, Meritxell Batet ha criticado la decisión del Gobierno de no someterse al control del Gobierno a pesar del "perjuicio que causa a las instituciones".

Pablo Iglesias, de Unidos Podemos, ha denunciado las "mentiras" del "Gobierno fantasma" cuando dijo que Soria era la "persona idónea" para ocupar ese puesto en el Banco Mundial y que se trataba además de un concurso público.

"Nombraron a Soria a dedo", ha criticado Iglesias, que cree que cuando un político "miente" debe dimitir por dignidad.

Ciudadanos también ha lamentado el daño que la ausencia de De Guindos del pleno hace a la credibilidad del sistema y de las instituciones.

"Este Gobierno puede hacer nombramientos en funciones y tomar decisiones. ¿Cómo no va a ser posible controlarlo en funciones?", se ha preguntado Juan Carlos Girauta.

El diputado del PNV Pedro Azpiazu ha asegurado que el responsable "con mayúsculas" del nombramiento de Soria es el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que defendió su designación incluso cuando el pasado verano el exministro de Industria manifestó su voluntad de presentarse al cargo.

Azpiazu ha afirmado que el nombramiento fue una "metedura de pata monumental" y ha criticado la lentitud del Tribunal Constitucional (TC) por no haber resuelto todavía el conflicto de atribuciones entre el Congreso y el Gobierno en funciones, que ha dicho que es una "anomalía democrática".

Por su parte, el portavoz de ERC, Joan Tardá, ha incidido en que la ausencia de De Guindos es "un desprecio a los diputados y un secuestro a su legitimidad" y ha lamentado que el TC sea "muy diligente" para suspender las leyes de Cataluña pero "ni tan siquiera se haya reunido para dirimir este otro asunto".

Desde el grupo mixto, PDC considera que no debería ser el ministro De Guindos el que compareciera sino el propio presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, por intentar "premiar" a un antiguo ministro que tenía sociedades en paraísos fiscales.

Críticas también de la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, que considera "indigna" la propuesta de Soria para ocupar un puesto en el Banco Mundial, mientras que Pedro Quevedo, de Nueva Canarias, ha alertado de que es imposible apoyar a un Gobierno que no quiere acudir al Congreso.

Por contra, Isidro Martínez Oblanca, de Foro, ha apoyado la posición del Ejecutivo, ya que comparte que un Gobierno en funciones no puede someterse al control parlamentario.

También en defensa del Gobierno, el secretario general del grupo parlamentario popular, José Antonio Bermudez de Castro, ha recordado que el ministro de Economía ya informó en comisión y con profusión sobre un nombramiento que además nunca llegó a materializarse.

"Este es un debate forzado y exagerado", ha dicho, tras aseverar que algunos de los que defienden que se puede someter a un control político ordinario a un gobierno en funciones hace pocos meses defendían lo contrario en el Parlamento de Andalucía y en Cataluña.

Bermúdez ha criticado que, por contra, el PSOE no permita una investidura y le ha pedido que ejerza ya como oposición y cumpla con el mandato de los españoles.