Tras el fracaso de Rajoy, Podemos no mueve ficha, espera que Sánchez aclare si su llamamiento a "las fuerzas del cambio" supone buscar una alternativa de Gobierno, aunque teme que los socialistas prefieran unas terceras elecciones.

Sin otras señales que les hagan pensar que el PSOE va a intentar desbloquear la situación, Podemos ha recibido con recelo la apelación de Sánchez, que fuentes de la dirección no se atreven ni siquiera a interpretar como una llamada a la negociación.

Algunos dirigentes no ven en la "ambigüedad" de Sánchez ningún cambio y están convencidos de que el PSOE camina ya hacia unas nuevas elecciones. Y si las palabras de Sánchez abocan a un tripartito con C's, no creen que puede salir adelante.