Está claro que quienes confían en la posibilidad de que el PNV acabe convirtiéndose en la tabla de salvación para una investidura de Rajoy tendrán que esperar por lo menos a que pasen las elecciones vascas del 25 de septiembre. Ayer se encargó de repetirlo el cabeza de lista de los nacionalistas vascos por Vizcaya, Josu Erkoreka, quien sentenció que un posible acuerdo PP-C's podría ser "la puntilla definitiva e irreversible" al autogobierno vasco. "Si la experiencia de la mayoría absoluta del PP ha sido muy negativa para el autogobierno y el modelo de convivencia y social vasco, la incorporación de Ciudadanos puede ser la puntilla definitiva e irreversible para nuestro autogobierno, y eso es profundamente preocupante", señaló el dirigente peneuvista.

A su juicio, el pacto PP-C's crearía una "confluencia de intereses entre quien ya viene acreditando una actitud radicalmente contraria al autogobierno vasco y quien predica obsesiones como la desaparición del Concierto Económico y la supresión de la tradición foral vasca".

Erkoreka pidió a la ciudadanía vasca que adquiera conciencia de esta "amenaza" para el autogobierno y aseguró que el PNV es un "muro infranqueable contra las agresiones".