El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, defendió ayer ante el Rey que sólo hay dos vías posibles: un gobierno de consenso con el PP, el PSOE y Ciudadanos, liderado por un "presidente nuevo", o bien una abstención general que dé vía libre a Mariano Rajoy para seguir en La Moncloa en minoría.

Rivera subrayó que su opción favorita, su 'plan A', es crear "un gobierno fuerte que luche contra la corrupción con las manos limpias", que aplique una agenda de reformas y que nazca de un acuerdo de los tres principales partidos constitucionalistas.

Rivera asume que "hoy por hoy" PSOE y PP "se dan la espalda" y que Rajoy "lo fía t a su silla".