Este domingo han llegado a la base aérea de Torrejón de Ardoz los tres periodistas españoles Antonio Pampliega, José Manuel López y Ángel Sastre, secuestrados en Siria desde julio del año pasado, según ha informado el Gobierno.

La noticia de la liberación se conoció a última hora de la tarde del sábado, cuando los tres reporteros se encontraban ya a salvo en Turquía, informaron fuentes del entorno de los tres periodistas.

Pampliega, López y Sastre fueron recibidos por sus familiares y por la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ya ayer pudo hablar con ellos cuando se encontraban en territorio turco. Mariano Rajoy, por su parte, ha expresado su alegría en Twitter:

Un avión Falcon 900 de la Fuerza Aérea Española despegó de la base de Torrejón para traer de vuelta a los periodistas, han señalado a Europa Press fuentes del Ministerio de Defensa.

Los periodistas españoles Pampliega y Sastre y el fotoperiodista José Manuel López desaparecieron en la ciudad de Alepo (Siria) el 12 de julio de 2015. Los tres trabajan como 'freelance' para diversos medios.

La última vez que se supo de ellos, antes de su liberación, fue en julio del año pasado cuando estaban en la ciudad de Alepo, que se encuentra bajo control del Frente Al Nusra, la filial siria de Al Qaeda. Los tres periodistas trabajaban en la citada zona como 'freelance' y habían entrado pocos días antes a Siria desde Turquía.

El fotoperiodista José Manuel López (León, 1971) acumula una larga trayectoria como corresponsal de guerra con un trabajo marcado por la denuncia de la injusticias por los que ha recibido multitud de premios.

El periodista extremeño Ángel Sastre llevaba seis años recorriendo América Latina como 'freelance' para televisiones, periódicos y radios nacionales y esa era la segunda vez que viajaba a Siria para retratar el dolor del conflicto en el país de oriente medio.

Pampliega, nacido en Madrid, es un periodista especializado en conflictos que trabaja para el diario digital Neupic y ha recibido el Premio de la Buena prensa a la mejor serie de reportajes por su trabajo en Alepo para El Mundo, además de haber sido finalista en categorías de reportajes por 'Los niños perdidos de Alepo', en El País.