El Gobierno, todos los partidos y las asociaciones de víctimas arremetieron ayer contra el dirigente de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi por su negativa a condenar la violencia de ETA. Además recordaron al líder de Sortu, quien pretende concurrir a las elecciones autonómicas vascas, que está inhabilitado para presentarse a comicios u ocupar cargo público hasta 2021.

Otegi protagonizó el domingo por la noche una entrevista televisiva en la que estimó "absurdo" condenar ahora la violencia de ETA: "¿Cómo me puedes pedir a mí ahora que yo condene una cosa del pasado cuando yo no la condenaba cuando se producía, y, además, he pagado claramente por no hacerlo, porque yo he sido ilegalizado, he sido detenido, he sido encarcelado".

Otegi aseguró, además, que la banda no fue derrotada por "golpes policiales", dijo tener "constancia" de que sectores del Estado están interesados en que ETA vuelva a atentar, y culpó a la Guardia Civil y a la Policía Nacional de impedir el desarme de la banda al controlar sus depósitos. Cada uno de estos extremos fue desmentido por el Gobierno.