Mariano Rajoy defendió ayer las diputaciones provinciales y acusó al PSOE y a Ciudadanos de sumarse a las tesis de los nacionalistas al incluir su supresión en el pacto de gobierno suscrito por ambas formaciones. El jefe del Ejecutivo en funciones clausuró ayer en Cuenca un acto con presidentes y portavoces del PP en diputaciones de toda España para reivindicar la tarea de estos órganos en favor de la España rural.

El PP quiere garantizar que los quince millones de personas que viven en el mundo rural tengan los mismos derechos que los habitantes de núcleos urbanos y evitar la despoblación de municipios, aseguró Rajoy. Añadió que las diputaciones vertebran el territorio nacional y prestan los servicios públicos necesarios en los pequeños municipios. Servicios, dijo, que en muchas ocasiones se abaratan merced a la intermediación de esas instituciones. "Además de eslóganes y afirmaciones categóricas, conviene dar razones y argumentos porque, si no, es muy difícil que los podamos tomar en serio", sentenció el líder del PP.

Por eso ha garantizado que el PP va a defender las diputaciones y el mundo rural español y ha hecho hincapié en que lo que funciona bien no se debe cambiar.

En el acto intervino también la secretaria general del PP y presidenta del partido en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, quien se preguntó si quienes como el PSOE quieren suprimir las diputaciones pretenden dejar sin servicios a los habitantes de municipios de menos de 5.000 habitantes.

Competencias

Desde Ciudadanos, su responsable de Economía, Industria y Conocimiento, Luis Garicano, reprochó a Rajoy que el único objetivo de sus defensa de la diputaciones es mantener "sus redes clientelares".

Garicano se pregunta "qué competencia de la diputación no puede ser asumida por la comunidad autónoma o por ayuntamientos de tamaño adecuado". Para el dirigente del partido de Rivera, los "muchos escándalos" que han surgido en estas instituciones muestran "por qué las defiende" Rajoy: "son pieza clave en sus redes clientelares, afirmó antes de enumerar una larga serie de casos de corrupción en los que se han visto envueltos responsables de los órganos supramunicipales.