Pedro Sánchez aprovechó ayer una visita a Bruselas -donde asistió a una reunión de líderes socialistas europeos- para pedir al primer ministro griego, Alexis Tsipras, que convenza a Pablo Iglesias de que facilite su investidura como jefe del Ejecutivo. La petición de Sánchez fue recibida con críticas por el PP y por En Comú Podem, la confluencia de Podemos en Cataluña.

Al secretario general del Partido Popular Europeo, Antonio López-Istúriz, le parece "vergonzoso" que el candidato del PSOE recurra a pedir "ayuda" al aliado de Podemos en Grecia, un "populista". Y Xavier Domènech, portavoz de En Comú Podem en el Congreso, le reprochó que haya ido "a Grecia para conseguir un Gobierno de España". Para Domènech, Sánchez debe asumir ya dos cosas: que "hay una mayoría para el gobierno del cambio", pero que, para fraguarla, es preciso negociar con Podemos y otras fuerzas, no con Ciudadanos.

Sánchez tiene previsto reunirse con Iglesias a principios de la semana próxima, en un encuentro que no contará con la presencia de ningún representante de C's, y el partido de Albert Rivera tampoco participó en la reunión de equipos negociadores de IU y el PSOE que se celebró ayer, aunque sí en la mantenida el martes con Compromís. Y todo ello pese a que C's y los socialistas anunciaron a bombo y platillo, después de la fallida tentativa de investidura de Sánchez, que desde ese momento negociarían juntos con los demás partidos, y siempre sobre la base del acuerdo de gobierno que sellaron en febrero.

El líder socialista y Rivera celebraron un encuentro en el Congreso a última hora de la tarde del miércoles para certificar que ese acuerdo seguirá siendo "la base de cualquier negociación".

Desbloqueo

En su breve entrevista con Tsipras, Sánchez le pidió su intercesión para que convenza a su aliado español de que "desbloquee" la investidura y "permita un Gobierno de cambio en España". "Le voy a decir al señor Tsipras que le pida al señor Iglesias que se ponga del lado de aquellos españoles que están sufriendo la crisis, la desigualdad y las políticas de austeridad que está practicando" el PP, anunció Sánchez. Fuentes próximas a Tsipras dijeron que éste declinó la petición. Así las cosas, el líder de C's advirtió ayer al PP que su negativa a sentarse a negociar con los equipos de su partido y del PSOE pueden terminar facilitando que Podemos "llegue al poder y los independentistas marquen la agenda política".

Y sobre el encuentro de los socialistas con IU sostuvo que su finalidad no es otra que "decirles que no puede haber negociaciones de exclusión", y que en España "no se construye un gobierno poniendo cordones sanitarios a nadie, ni al PP, ni a Podemos, ni a Ciudadanos ni al PSOE".