El líder del PP, Mariano Rajoy, ha criticado hoy la política del "postureo" que se está dando estos días con las negociaciones para la investidura y ha abogado por aportar algo de "cordura" a esta situación.

Rajoy ha insistido en que mantiene su propuesta de una gran coalición con el PSOE y Ciudadanos, que seguirá defendiendo en el futuro, y con un gobierno que presida el PP "por una razón que se entiende muy bien: y es que 123 son más que 90, por lo menos así lo pensamos aquí", ha señalado en alusión a la diferencia de escaños que su partido tiene sobre los socialistas.

En un acto de Nuevas Generaciones en Bilbao, Rajoy ha insistido en que el partido entendió desde el mismo 20 de diciembre lo que pidieron los ciudadanos a las fuerzas políticas: que hablen, se entiendan y pacten.

Determinación para hablar con Sánchez

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha expresado su determinación de ser de nuevo el candidato del PP a la jefatura del Ejecutivo si se repitieran las elecciones, y ha avanzado que si el líder del PSOE, Pedro Sánchez, fracasa en su investidura, le llamará para volver a ofrecerle un pacto.

Rajoy ha analizado la situación en España a la espera de la investidura de un presidente en la conferencia de prensa que ha ofrecido al término del Consejo Europeo de Bruselas en el que ayer se le escuchó comentar a varios líderes europeos, entre ellos David Cameron, que lo más probable es que haya nuevas elecciones en España el 26 de junio.

Ante esa hipótesis y al plantearle si él volvería a ser el candidato del PP, ha sido claro: "Si se produjeran elecciones quiero ser el candidato del Partido Popular. Lo he sido en las últimas, hemos ganado las elecciones con una diferencia de más de 1,7 millones de votos sobre el segundo y con 33 escaños por delante". "Por tanto, mi intención es volver a presentarme en el supuesto de que hubiera elecciones", ha insistido.

Pero, de momento, ha emplazado a esperar a comprobar si Sánchez es capaz de conseguir su investidura en la sesión que comenzará en el Congreso el próximo 2 de marzo.

"Si no, yo lo llamaré para ver qué es lo que quiere, porque si no consigue lo que pretende supongo que entonces se sentará a hablar con el Partido Popular de una postura y un planteamiento que es sensato y que es el que se aplica en los países de la UE", ha añadido.

Ha explicado que su intención sería en ese caso reunirse con Sánchez en "24 horas" donde él desee, y ha insistido en que si no es investido, él intentará conseguirlo pero siempre y cuando cuente con los apoyos suficientes para lograrlo. "Si el señor Sánchez no gana la investidura, los que no hemos ido a la investidura porque no teníamos los votos suficientes, ya que a la investidura se va para ser investido, lo intentaremos", ha subrayado. Pero ha recalcado que sólo aceptaría el encargo si tiene la seguridad de que va a ser investido presidente.

"Si yo creo que tengo posibilidades de ganar la investidura, yo iría, pero si el PSOE no quiere no es posible", ha reconocido.

Ante la posibilidad de que en esa reunión que prevé con Sánchez le ofreciera ser su vicepresidente ha explicado que desde el 21 de diciembre viene diciendo que "todo es discutible y negociable" para la formación de ese gobierno sustentado por PP, PSOE y Ciudadanos.

"El Gobierno puede ser de coalición, puede funcionar con apoyos parlamentarios, como quieran. Eso es lo que hay que hablar", ha añadido.

Rajoy ha insistido en que sólo ve dos posibilidades de gobierno en España, la "sensata" que él defiende y la del PSOE con Podemos, sus partidos afines, IU, PNV y la abstención de los independentistas catalanes.

Por eso, ha reiterado que "lo más posible en este momento es que haya elecciones".

"Lo cual no quiere decir que yo no vaya a dar la batalla para que se haga lo razonable y lo sensato, que el primer partido, el segundo y el cuarto formen un gobierno que tendría 252 escaños, podría hacer reformas y daría un mensaje desde el punto de vista económico muy potente y que generaría mucha confianza dentro y fuera de España", ha añadido.

Tras lamentar que Sánchez no haya querido hablar hasta ahora de su oferta, ha señalado que "en la vida se puede rectificar", y ha calificado de "tremendo" que hubiera en España un gobierno de izquierdas e independentistas que está convencido de que no podría gobernar.

El presidente en funciones se ha referido a la lucha contra la corrupción para insistir en que seguirá haciendo todos los esfuerzos posibles contra esa lacra y para garantizar que aceptará todas las propuestas razonables que le hagan llegar.

Ha recordado que hay casos que afectan al PP, al PSOE, a Compromís y a otras fuerzas políticas y que "vienen de atrás".

"El esfuerzo que tenemos que hacer ahora todos es ser contundentes, claros y seguir aprobando normas que nos hagan ser más eficaces contra la corrupción", ha subrayado.