La CUP ha decidido trasladar su asamblea del día 27 de diciembre de Esparraguera (Barcelona) a Girona por cuestiones de aforo, ante el alto número de personas inscritas, 1.700 hasta ayer. Será la asamblea pública nacional en la que se decidirá si la CUP apoya o no la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat. Según se acordó ayer, el voto en la asamblea será secreto y mediante un mando electrónico. Se decidirá entre cuatro opciones. Las dos favorables al actual presidente son o apoyar el acuerdo político y a Mas o decir no al acuerdo político pero sí a Mas. Así se evitan las elecciones anticipadas. La tercera opción es oponerse a Mas. Y la última rechazarlo todo.

La CUP prevé que su asamblea del día 27 comience a las nueve de la mañana y acabe a las seis de la tarde. A las once permitirá a la prensa que tome imágenes de la reunión y hacia las 18.30 horas ofrecerá una rueda de prensa con la decisión, que se retransmitirá en directo por internet.

Por medio de la discusión política en la CUP el nuevo presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha pedido a JxSí y a la propia CUP que lleguen a un acuerdo para la "desconexión" de Cataluña con España. El diputado de JxSí, Raúl Romeva, ha respondido al mensaje de Jordi Cuixart y ha asegurado que están trabajando en ese objetivo de deconexión a pesar de que "algunos quieran que avancemos hacia donde no se puede avanzar".

En declaraciones a los medios tras la presentación del nuevo presidente de Òmnium, Romeva afirmó que "es evidente que hay una demanda ciudadana, social y democrática para que avancemos hacia donde podemos avanzar", y ha expresado que como personas que tienen la responsabilidad representativa de la sociedad civil están trabajando para cumplir ese encargo. Romeva ha valorado que lo que se les pide desde la sociedad civil "es un encargo muy claro", para construir una Cataluña mejor, con justicia social y donde todo el mundo, independientemente de donde venga y de la lengua que hable, se sienta cómodo y partícipe", argumentó.

El mensaje de Cuixat fue directo a JxSí y a la CUP para que lleguen a un acuerdo de Govern: "Adelante, pero lleguen a un acuerdo como sea". Y ha pedido que el pacto debe tener "sentido de Estado y apostar por la justicia social". Lo ha dicho en su discurso de presentación como nuevo presidente de la entidad soberanista, donde ha subrayado que la nueva junta directiva no viene a dar "ni un paso al lado", y ha asegurado que apoyarán al President y a los diputados y diputadas que defienden la declaración de desconexión de Cataluña con el Estado español.

Jordi Cuixart ha afirmado que la entidad cumple una función de generar consensos, y ha reivindicado que son los que tienden el último puente cuando parece que ya no los hay los que generan consensos, y se ha comprometido a seguir siendo un "espacio amable". El nuevo presidente de Ómnium Cultural concluyó diciendo con contudencia política y cierto mensaje social que "defenderemos la legitimidad del pueblo de Cataluña".