Los políticos de partidos rivales no siempre se llevan a cara de perro. La socialista Carmela Silva tenía a Teófilo de Luis, del PP, como compañero de escaño, en la Mesa del Congreso, y aunque es "muy de derechas", acabaron "siendo amigos". "Incluso él terminó siguiendo al Génova y últimamente a La Roma", comenta la ahora presidenta de la Diputación de Pontevedra, en alusión a los equipos de fútbol italianos en los que juega su hijo, Iago Falque. Silva, a quien que le encantaba escuchar a Gaspar Llamazares, se queda con el recuerdo de haber sido una de las pocas personas que vivió "en primera fila" la toma de posesión del nuevo rey de España".