Los hermanos Josep y Pere Pujol Ferrusola mantuvieron ayer ante el juez José de la Mata de la Audiencia Nacional, al igual que hizo su padre, el expresidente catalán Jordi Pujol, en una confesión pública en julio de 2014, que el dinero que tenían en cuentas de Andorra provenía de una herencia de su abuelo que luego dio beneficios a raíz de diferentes inversiones.

Según informaron a "Efe" fuentes jurídicas, los hermanos, imputados por blanquear supuestamente dinero procedente de comisiones ilegales a cambio de adjudicaciones públicas, fueron interrogados durante seis horas por los ingresos registrados en sus cuentas del Principado, algunos de ellos de su hermano mayor, Jordi Pujol Ferrusola, aunque en algunos casos no supieron explicar a qué se debían.

Transferencias

Según consta en los movimientos de esos depósitos, en algunos casos el primogénito recibía el dinero en su cuenta y luego lo repartía entre sus seis hermanos, unas transferencias que los investigadores atribuyen a comisiones ilegales y que ayer Josep y Pere Pujol han achacado a las inversiones de la herencia gestionada por el mayor.

Los dos hermanos quedaron en libertad sin medidas cautelares después de contestar en castellano y "sin restricciones" a las preguntas del instructor.