El lendakari, Iñigo Urkullu, aseguró ayer que los principales partidos del Estado tendrán que hacer frente "necesariamente, tras la celebración de las elecciones generales del próximo 20 de diciembre, no a dos conflictos, los de Euskadi y Cataluña", sino al "único problema" que España tiene actualmente, que es, en su opinión, "el modelo de Estado y su replanteamiento".

Asimismo, el jefe del Gobierno vasco afirmó que, más allá de la importancia que tiene la propuesta de resolución con la que JxSí y la CUP quieren declarar el "inicio del proceso" independentista hacia una república en Cataluña, "hay que trabajar en el día a día". Por ello, Urkullu consideró que se abre "un período de 18 meses" para el diálogo entre los gobiernos y las fuerzas políticas catalanas y españolas.

Urkullu reiteró la importancia de la declaración que va a aprobar este lunes el Parlamento catalán, y recordó que en Euskadi también se han aprobado declaraciones "que parece que se nos olvidan, como una por la autodeterminación en 1990, la aprobación por mayoría absoluta del nuevo estatuto político y la de una ley de consulta que posteriormente anuló el Constitucional".

Dieciocho meses es el plazo que se han dado los independentistas para culminar el proceso de secesión.