El presidente Mariano Rajoy respondió ayer a Artur Mas que las funciones del Rey son las establecidas en la Constitución y no cabe "estar poniéndolas en tela de juicio", en referencia a la petición del dirigente catalán de que Felipe VI medie en su enfrentamiento con el Gobierno para celebrar un referéndum independentista.

Rajoy dejó claro que no habrá consulta en noviembre en Cataluña y rechazó la posibilidad de que él se siente a negociar esta propuesta sobre la mesa. Acto seguido, pidió a Mas "un esfuerzo por situarse en un espacio de sentido común y sensatez". El político soberanista negó haber pedido una audiencia al Rey en la cena del jueves en Gerona para no ponerlo en un compromiso.

Mas advirtió del peligro de que "la corriente se acabe desbordando" si el Gobierno no canaliza la situación y no adapta o interpreta abiertamente los marcos legales para permitir la consulta. La Generalitat quiere tener lista la ley de consultas para el día 16. Por otra parte, la vicepresidenta Sáenz de Santamaría, recibida en audiencia por el Rey, dijo que el aforamiento de don Juan Carlos no es impunidad