Consciente de que estaba asistiendo al inicio de un reinado, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, fue testigo de primera mano del relevo en la Corona, un acto que describió como "solemne, pero sin excesos y cargado de emotividad".

Tras asistir al acto de proclamación del nuevo Monarca, el jefe del Ejecutivo gallego recordó como a Don Juan Carlos "se le llenaron los ojos de lágrimas" cuando cedió la silla a su hijo el pasado miércoles y explica que el propio Felipe VI le confesó al entrar ayer a las Cortes "la impresión y el respeto" que le producía ese escenario que cuarenta años antes ya había sido testigo de la coronación de su padre.

Feijóo tuvo ocasión de charlar distendidamente con el nuevo Monarca. "Le dije: acaba usted de tomar posesión del Palacio y menuda tarea le queda". Tras el acto en el Congreso formó en un corrillo junto al secretario general del grupo socialista, Eduardo Madina, transmitió a los Reyes su interés en que volvieran a visitar Galicia. "Espero que vengan el Día 25 de julio", comentó el presidente de la Xunta. "También hablamos de Angrois", explica Feijóo.