El aspirante a secretario general del PSOE Eduardo Madina se ha ofrecido para liderar el "shock de modernidad" que, a su juicio, necesita España, en nombre del "tiempo nuevo" que ha comenzado a abrirse en su partido, ha dicho.

Diputado por Vizcaya, Madina ha anunciado oficialmente su incorporación a la carrera por liderar el PSOE en un pasillo del Senado, junto al busto del histórico dirigente del partido y primer lehendakari vasco en la etapa preautonómica, Ramón Rubial, referente ético y moral de los socialistas.

Madina, que ha anunciado su dimisión como vocal de la Ejecutiva Federal en pos de la "igualdad de condiciones" con otros candidatos, ha explicado que seguirá, no obstante, de secretario general del grupo en el Congreso, por entender que ese es un cargo institucional y que el partido debe mantener la normalidad parlamentaria.

En rueda de prensa, ha subrayado que ha tomado la decisión de presentarse consciente de la "gravedad de la situación" que atraviesan el país y millones de españoles, y de que un "tiempo nuevo" va a empezar en el PSOE el próximo 13 de julio, al que él quiere aportar su "granito de arena" con esta candidatura.

Un tiempo nuevo que "terminará con la vuelta del PSOE para la producción de un shock de modernidad" en el país, ha apostillado.

En su opinión, España "no necesita pequeñas reformas, pequeños pasitos adelante que luego vuelven a ser pasos atrás con los gobiernos del PP", sino un "shock de modernidad que coloque a sus ciudadanos en el lugar en el mundo que merecen", ha subrayado.

Tras asegurar que se siente "muy arropado" en su decisión por "miles" de compañeros, se ha comprometido a que, si los militantes le eligen secretario general, convocará "en tiempo y forma" las primarias abiertas previstas para elegir en noviembre al candidato a la Presidencia del Gobierno.

"Me siento muy arropado, si no, no estaría aquí, siento que hay una oportunidad y he querido explorarla", ha afirmado.

Se ha comprometido asimismo a "contribuir" a lo que el partido le pida y se ha mostrado "a disposición de la unidad", consciente de que es "clave en este congreso".

Un congreso "histórico"

Un congreso extraordinario que se celebrará el último fin de semana de julio y que espera que sea "histórico" para que el PSOE pueda diseñar "el primer paso hacia el futuro" y ganar las próximas elecciones municipales, autonómicas y generales.

"El paso adelante que doy lo doy para acompañar al PSOE hacia la recuperación de sus vocaciones de mayoría y para dejar un ejemplo mañana de que la valentía en momentos de mayor complejidad es siempre el mayor legado que nos dejó Ramón Rubial y muchos compañeros vascos de los que aprendí que el compromiso es siempre un paso adelante y nunca un paso atrás", ha certificado.

Abierto a que los socialistas debatan sobre Monarquía o República, ha apostado por una reforma "profunda" de la Constitución en el sentido federal y para asegurar la convivencia de todos en el país, en la que el PSOE -desde su punto de vista- siempre ha sido el "pilar central".

Ha abundado en esta idea al defender el fortalecimiento de los lazos con el PSC y al descartar siquiera imaginarse a un partido socialista "rupturista" con la convivencia.

También ha indicado que en los últimas días ha hablado con la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, después de que ella anunciara que no iba a competir por la Secretaría General del PSOE, y que su conclusión es que todos los socialistas son conscientes de que tienen que ir a un congreso de renovación, de fortalecimiento interno y de unidad y reacción.

Respecto a debatir con otro de los aspirantes, el diputado madrileño Pedro Sánchez, Madina se ha declarado "encantado" de debatir con todos los candidatos.

No ha querido pronunciarse sobre la petición del extremeño Guillermo Fernández Vara para que los dirigentes con peores resultados en las pasadas elecciones europeas sigan el ejemplo de Rubalcaba y se vaya.

Ha ofrecido además algunas pinceladas del su proyecto, que empieza por "abrir los partidos" y sigue por hacer unas instituciones transparentes, comenzando por el Senado, una "metáfora" de las necesidades de transformación que, en su opinión, tiene el conjunto del país.

Con él ya son cinco los aspirantes que han empezado a recabar los 10.000 avales necesarios para validar su candidatura, tras haberlo hecho ya el diputado por Madrid Pedro Sánchez, el exdiputado José Antonio Pérez Tapias en nombre de la corriente Izquierda Socialista; el afiliado al PSM Alberto Sotillos, del grupo Socialismo Democrático, y el militante de Puertollano (Ciudad Real) Manuel Pérez García.