A sabiendas de que el Congreso se negará mañana en redondo a transferir a la Generalitat la competencia para convocar referendos, Artur Mas aseguró ayer -colocándose la venda antes de que le sea infligida la herida- que el "no" de la Cámara baja no podrá "parar la voluntad del pueblo de Cataluña".

Varios dirigentes de tendencia soberanista han empezado a calentar motores ante el debate de mañana en el Congreso, donde, por primera vez, se les escuchará defender su reivindicación en la sede de la soberanía nacional, esa que la "número dos" del PP, María Dolores de Cospedal, les recordó ayer que no se puede "negociar" ni "repartir".

Y, por lo que allí pueda terminar ofreciéndoseles, CiU y ERC se apresuraron a advertir de que no renunciarán a la consulta a cambio de una financiación mejorada, lo que el republicano Alfred Bosch llamó "un plato de lentejas" y la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, refiriéndose a la permuta, tachó de "cambio de cromos".

Con respecto al formato del debate, es ya sabido que no será Mas quien defienda la petición de que se delegue la competencia que regula el artículo 150.2 de la Constitución. No quiere repetir la imagen de derrota de Ibarretxe para no dar a sus detractores una victoria.

En vez del President, se sentarán en la tribuna de invitados Francesc Homs, portavoz del Govern, y Josep María Pelegrí, consejero de Agricultura. Y la petición la harán desde la tribuna de oradores Jordi Turull (CiU), Marta Rovira (ERC) y Joan Herrera (ICV).

Cada uno hablará durante diez minutos, y todo está pensado para que sus discursos no cedan al reproche ni a la diatriba contra el Gobierno, aunque es seguro que alguno recordará el tenor de la reciente sentencia del Tribunal Constitucional, que estableció que el "derecho a decidir", como aspiración política, no es contrario a la Carta Magna.

Antes se dará lectura al informe que el Ejecutivo de Rajoy remitió hace semanas a la Mesa para fijar su posición sobre la consulta del próximo 9 de noviembre.

Rajoy estará sentado en su banco azul, pero se ignora si intervendrá; como tampoco se sabe si lo hará el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, cuyo Grupo, como ya se ha anunciado, votará en el mismo sentido que el PP. Lo mismo que harán UPyD y UPN.

Los socialistas emitirán su conocido mensaje, contrario al "derecho a decidir" pero animando al diálogo para reformar la Constitución con la meta de que España se convierta en un Estado federal.

Antes de que el portavoz del PP, Alfonso Alonso, cierre el debate justificando el "no" de su grupo, subirán a la tribuna de oradores Josep Antoni Duran Lleida (CiU), Joan Coscubiela (la Izquierda Plural) y Alfred Bosch (ERC), y podrán escucharse también los "síes" de BNG, Amaiur y Geroa Bai.

Después, rechazada la petición de que se delegue la competencia, Mas acelerará la tramitación de la nueva ley catalana de consultas populares, en la que fundamenta la convocatoria de una consulta "tolerada", pues la legal, con el aval del Congreso, ya será historia.