El presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, ha asumido este domingo que "previsiblemente" el Congreso se negará a transferir la competencia para convocar referendos, pero ha advertido a renglón seguido: "Se puede decir 'no' a una ley -la que pide el traspaso de esa competencia-, pero no se puede parar la voluntad del pueblo de Cataluña".

A dos días del debate en el Congreso sobre la petición del Parlament de disponer de la competencia para convocar referendos, Mas ha lanzado este mensaje en un acto solemne en el Salón Sant Jordi del Palau de la Generalitat para conmemorar el centenario de la Mancomunitat de Catalunya.

Mas ha garantizado que el pueblo catalán siempre se expresará de manera "civilizada, constructiva y dialogante", pero ha dado por supuesto que se movilizará "no solo en la calle, sino en todas partes", en defensa de sus aspiraciones.

"Porque lo que está pasando en Cataluña, aunque algunos no se lo crean, no es la fijación de unos pocos sino la voluntad de muchos. No es la voluntad de unos pocos líderes descerebrados", ha subrayado Mas, que no acudirá a Madrid a seguir el debate, aunque hoy ha querido enviar este mensaje al Congreso.

Mas se ha referido a la Mancomunitat, creada el 6 de abril de 1914, justo ahora hace 100 años, para reivindicar que la voluntad de "pacto y de entendimiento" con el Estado ha sido en la historia reciente una constante del gobierno y las instituciones catalanas.

El presidente catalán ha sentenciado que ahora Cataluña está "a las puertas de otro momento importante", en alusión al debate del Congreso.

"Previsiblemente nos dirán que no, pero fijaos, lo digo en nombre de cien años de acción catalanista y de voluntad de pacto con el Estado. Si nos dicen que 'no', dirán que 'no' a una ley, pero este 'no', no podrá parar la voluntad del pueblo de Cataluña", ha sentenciado.

Mas se ha mostrado convencido de que la delegación catalana irá al Congreso "con voluntad de entendimiento y de pacto", y como prueba de ello ha recordado que la proposición de ley apela a la Constitución para solicitar este traspaso. "Espero que haya buen tono y que Cataluña sepa explicarse", ha comentado.

"No había una voluntad de separarse del Estado, sino de entendimiento; también fue así con el Estatut que se intentó promover en 1918 y que acabó con la dictadura; con el Estatut que se promovió en la etapa republicana y que acabó con la Guerra Civil; con Estatut de 1979, que acabó años más tarde con un golpe de Estado y con la Loapa, y como ha pasado con el (Estatut) de 2006, tras el cual no ha habido una dictadura ni una guerra, pero sí en una sentencia del Tribunal Constitucional", ha comentado.

De esta forma, Mas ha subrayado la continuidad histórica de Cataluña en su voluntad de autogobernarse, y ha reivindicado el legado tanto de Enric Prat de la Riba como de Francesc Macià, al tiempo que ha recordado que uno los retos de Cataluña es dotarse de una Hacienda propia.

El acto ha reunido a los expresidentes Jordi Pujol y José Montilla, a los presidentes de las cuatro diputaciones catalanas, Joan Rañé (Lleida), Joan Giraut (Girona), Josep Poblet (Tarragona) y Salvador Esteve (Barcelona), así como al presidente en funciones del Parlament Lluís Maria Corominas.