El juez José Castro, instructor del "caso Nóos", ha declinado recabar a Diego Torres los correos electrónicos pendientes de aportar, como le sugirió la Audiencia de Palma. Su primera respuesta al auto del tribunal cerrando las puertas a la imputación de la Infanta Cristina ha sido escarbar en una reunión mantenida en la Zarzuela, en 2004, y a la que asistieron Iñaki Urdangarín; su mano derecha, Diego Torres, y los líderes del PP valenciano Rita Barberá y Francisco Camps.

La Audiencia le marcó a Castro la tarea de, antes de archivar el caso o confirmar la imputación para la Infanta, pedir a Torres todos los correos sobre Nóos no incriminatorios para él, pero sí teóricamente comprometidos para la hija del Rey. El juez, de momento, no ha acatado dicha sugerencia. Su reacción ha sido profundizar en uno de los indicios de que Urdangarín se prevalió de su pertenencia a la Familia Real para captar dinero público destinado a la organización de eventos de Nóos, el instituto sin ánimo de lucro presidido por él.

Torres reveló el pasado febrero que, hacia marzo de 2004, el duque le convocó a una reunión en la Zarzuela con el entonces presidente valenciano, Francisco Camps, y la alcaldesa, Rita Barberá. El yerno del Rey rechazó haber mantenido esa entrevista en la residencia oficial del Monarca en Madrid.

Según Torres, al encuentro asistieron Urdangarín, los dos políticos del PP y él, que hizo una exposición del proyecto para hacer en Valencia un foro sobre ciudades sede de acontecimientos deportivos. Poco después, las autoridades de esa región firmaron un contrato con Nóos para organizar el foro Valencia Summit, la idea que el duque presentó en la Zarzuela. El exsocio añadió que ese encuentro estuvo precedido de una conversación entre Urdangarín y Barberá, en un acto al que asistió la Infanta Cristina.Torres dijo que la alcaldesa y el yerno del Rey hablaron de esos proyectos.

Ahora Castro quiere que el exsocio le cuente, con la mayor precisión, día, hora, contenido e intervinientes en la Zarzuela. El instructor quiere saber si los políticos valencianos habían asistido ese día a algún acto oficial en Madrid y si hubo otras personas en esa reunión. Castro va pedir presumiblemente a la Casa Real los libros de control de visitas de ese mes, para comprobar si Camps y Barberá fueron reseñados a su entrada y salida de palacio.Torres afirmó que él no vio al Rey en esa visita y que sólo los cuatro citados asistieron al encuentro.

Mientras, la Agencia Tributaria ha aportado al juez Castro las declaraciones de la renta de los últimos diez años de Urdangarín y de su esposa. El instructor ha incorporado al sumario las del primero y deja las de la Infanta aparte. Cristina ha recurrido esa prueba y su condición ahora es la de parte perjudicada.