La situación interna del PSOE, con los recientes frentes abiertos en Cataluña y Galicia, ha agudizado la preocupación e incluso algunos dirigentes temen que se precipiten los acontecimientos y tengan que adelantar la elección de un candidato antes de lo que marca la hoja de ruta trazada por la dirección federal del partido.

Así piensan algunos dirigentes consultados por Europa Press, que ven difícil que la situación aguante hasta después de las elecciones europeas previstas para mediados de 2014, sobre todo si se siguen abriendo nuevos frentes como ocurrió el pasado fin de semana, cuando el PSdeG decidió hacer, antes del Congreso de la federación gallega, una consulta a los militantes sobre quien debe ser el secretario general.

Una decisión que no cabe en los estatutos del partido y que Ferraz ha optado por estudiar para buscar una fórmula que de satisfacción a los socialistas gallegos, pero que encaje en los estatutos. Pero no parece que la cuestión sea pacífica, después de que el dirigente de la federación madrileña, Tomás Gómez, haya alabado la decisión de sus compañeros de Galicia, asegurando que estos marcan el camino que debe recorrer todo el PSOE, y que todas las federaciones y la dirección nacional deben hacer lo mismo.

Este hecho se viene a sumar al desaliento anterior existente, ya que el Debate sobre el estado de la nación no supuso una bocanada de aire fresco para los socialistas, que ya venían desmoralizados tras el maltrato de las urnas y las posteriores encuestas, y la indisciplina del partido hermano en Cataluña, el PSC, que ha contribuido a echar más leña al fuego.

Ambas partes han optado por cambiar el marco de relaciones entre el PSOE y el PSC, pero muchos dirigentes son conscientes de la dificultad de lograr un pacto mejor que el actual. De hecho, algunos próximos a Rubalcaba creen que sería mejor no tocarlo, porque ven difícil conseguir algo mejor.

DIFICIL CONSEGUIR UN ACUERDO MEJOR QUE EL ACTUAL CON EL PSC

Esta preocupación se une a la de muchos militantes de base, según explica uno de los dirigentes territoriales consultados, que señala que en las últimas reuniones que ha tenido en las agrupaciones para abordar cuestiones locales, le han trasladado el malestar existente y la desilusión por la situación, destacando el hecho de que perciben que el modelo de Estado que plantea el PSC se aleja del que defiende el PSOE.

En este sentido, uno de los consultados se lamentaba de que los "líos" internos del PSOE que se están publicando "día si, y día también", sólo sirven para perjudicar al partido y dibujan "una cortina de humo para tapar los errores del PP".

Y como muestra, la crisis abierta esta misma semana con la decisión del PSOE de Ponferrada de acceder a la alcaldía con el voto de un condenado por acoso sexual. Un hecho ante el que reaccionó tarde la dirección federal, que esperó a la última hora del viernes ordenó rectificar la moción de censura que habían consumado ya sus compañeros leoneses.

Además, varios dirigentes consideran que la Conferencia Política que está prevista para otoño no se va a poder "capitalizar" por falta de un líder claro en el PSOE. De hecho, afirman que las propuestas que surgen de las conferencias sectoriales preparatorias están pasando desapercibidas. "¿Quién va a capitalizar esa conferencia, alguien que ya está amortizado?", se pregunta uno de los consultados.

Otros temen que, si no cambian las cosas y los socialistas no logren que cale su labor de oposición en vez de las discrepancias internas, esa Conferencia de otoño se va a convertir en un hervidero de comentarios sobre quién se presentará a las primarias y quién tiene más posibilidades.

Quienes esgrimen estos argumentos creen que los propios acontecimientos que está viviendo el PSOE pueden acabar precipitando las decisiones. "No se por dónde romperán las aguas, la gente no lo soporta", exclamaba uno de los dirigentes, que sostiene que la dirección del partido no es ni insensible, ni sorda ante esta situación.

TEMEN BATACAZO HISTÓRICO EN LAS EUROPEAS

Por eso creen muy probable que las primarias para la elección del candidato tengan que producirse antes de las elecciones europeas. Son varios los que alegan que si el partido no hace algo que sirva de punto de inflexión, el resultado de esos comicios de 2014 puede ser un "batacazo histórico", que será difícil de superar en las municipales y autonómicas de 2015. Además, dudan de que sea la mejor idea elegir un candidato después de un mal resultado electoral.

Otras dirigentes territoriales explican que la "complejidad del momento exige serenidad", que "lo lógico" es que el partido siga la hoja de ruta que se han trazado y creen que cambiarla ahora no solucionará nada. Eso sí, no se cierran a que los planes se puedan cambiar, pero sólo si se hace por consenso de todos. En este sentido, señalan hacia el Consejo Territorial fijado para junio. "Si hay que cambiar la ruta, tendrá que ser, como mínimo, hacia el verano", apostilla uno de los consultados, quien además rechaza la idea lanzada el lunes por Tomás Gómez, de convocar un Comité Federal. "Eso no va a solucionar nada", exclamó.

Estas fuentes dejan clara que su posición es que por el momento hay un acuerdo para desarrollar este año la Conferencia Política y para que el calendario de primarias se fije para después de las europeas. "Si no hay un acuerdo para cambiarlo, mejor centrarnos en la oposición y demostrar que tenemos alternativa a los errores del PP", apostilló.

No obstante, estas fuentes también dicen no saber si la situación va a aguantar hasta las europeas o no, aunque también afirman que no ven tantos movimientos internos como para pensar que se puedan precipitar los acontecimientos.

Incluso, aunque admiten que Carmen Chacón está proliferando los actos a los que asiste --esta semana estuvo en la comunidad valenciana y ayer, en Tomelloso, invitada para celebrar el día de la mujer-- y manifestando sus opiniones sobre algunos asuntos, eso no significa que esté planificando nada. "No está en una cueva", argumentó uno de los consultados, que defiende la postura de la exministra y afirma que está manteniendo una gran lealtad con el calendario acordado.