El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, no ha querido opinar sobre las declaraciones de su compañero de Gabinete Jorge Fernández Díaz en contra del matrimonio homosexual, pero ha sentenciado: "Allí donde hay amor está plenamente justificada la unión de dos personas".

Gallardón, en una entrevista en Radio Nacional, ha reconocido que no ha hablado todavía con su compañero y "buen amigo" el ministro del Interior y ha considerado que antes de opinar sobre unas declaraciones es bueno contar con la explicación y análisis completo del que las hace.

En un coloquio en Roma, Fernández Díaz dijo que el "matrimonio entre personas del mismo sexo no debe tener la misma protección por los poderes públicos que el matrimonio natural", ya que la "pervivencia de la especie, por ejemplo, no estaría garantizada".

Ruiz-Gallardón ha querido, no obstante, ofrecer su opinión y ha insistido en que "por encima de cualquier otra consideración, lo que justifica una relación conyugal es el amor", la necesidad de encuentro de dos personas y su voluntad de compartir sus vidas.

Y eso que se llama amor es, a juicio de Gallardón, lo que debe llevar a los poderes públicos a "crear los instrumentos adecuados para que ese amor tenga efectos jurídicos y su desarrollo en una sociedad avanzada".

Ruiz-Gallardón ha recordado hoy al fiscal jefe de Cataluña, Martín Rodríguez-Sol, que las limitaciones a jueces y fiscales a participar en el debate político garantizan su función e independencia.

De este modo se ha referido Gallardón, en una entrevista en Radio Nacional, al expediente que el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, abrió a Rodríguez-Sol por opinar en una entrevista sobre la consulta soberanista catalana y que ha llevado a éste ha presentar su renuncia.

Gallardón no ha querido entrar en el fondo de las manifestaciones del fiscal de Cataluña, pero ha dejado claro que jueces y fiscales "tienen limitaciones en su libertad de expresión que no tienen el resto" y que se establecen "en garantía de su propia función".

De este modo, ha recordado que si un juez o fiscal participa en un debate de carácter político y después tiene que intervenir en una causa judicial sobre ese asunto, queda "contaminado" y puede ser acusado de haber perdido su independencia.

Se ha referido también a la Ley de Tasas Judiciales y ha recordado que la Justicia "no es gratis" y que España cuenta con las tasas más bajas de la Unión Europea.