El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, exigió ayer al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que comparezca de inmediato para explicar en persona si realmente percibió los sobresueldos de los que se le acusa y si lo hizo "en negro o en blanco".

Rubalcaba, que compareció en rueda de prensa en Santa Cruz de Tenerife apenas unos minutos después de que finalizase la suya la "número dos" del PP, Dolores de Cospedal, calificó como "crítica" la situación de España y no dudó en afirmar que las informaciones publicadas ayer por "El País" han desatado una situación de "auténtica alarma social".

Para el líder socialista, las explicaciones ofrecidas ayer por Cospedal "no valen", ya que, dijo, se trata de la misma persona que intentó paralizar las investigaciones policiales y judiciales al PP en relación con el "caso Gürtel" tratando de presentarlas ante la opinión pública como un espionaje. Rubalcaba sostuvo que el "caso Gürtel", en el que se enmarca el actual "escándalo Bárcenas" no es un expediente de corrupción "cualquiera", sino que es "infinitamente más grave", ya que afecta a varias comunidades autónomas, ayuntamientos y, ahora, al partido que gobierna en España.

"Tiene que ser el presidente del Gobierno el que dé explicaciones. (...) Es su responsabilidad porque lo que hoy está en tela de juicio no es sólo el nombre del PP o del presidente del PP, es el nombre del presidente del Gobierno de España", subrayó Rubalcaba.

El líder socialista hizo especial hincapié en que Cospedal carece de credibilidad, ya que, dijo, una de las explicaciones que ofreció días atrás sobre el asunto de los sobresueldos de la cúpula del PP fue que ella "las cortó cuando llegó". Esas afirmaciones, enfatizó Rubalcaba, causaron aún más alarma, por equivaler a reconocer los hechos que ayer la propia Cospedal negó.

El secretario general del PSOE dedicó una parte de su comparecencia ante los medios al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, cuya dimisión inmediata exigió. "Tenía que haberse ido ya", dijo, tras recordar que Bárcenas ha blanqueado once millones de euros a través de la amnistía fiscal. Rubalcaba se mostró seguro de que hay "otros muchos Bárcenas que se han colado" por la vía de la regularización fiscal.