Más de 200 personas, entre ellos amigos y familiares, se han congregado este domingo ante la Embajada de Estados Unidos en Madrid para pedir "justicia" en el noveno aniversario de la muerte del cámara español José Couso, fallecido en 2003 en Bagdad por disparos del Ejército estadounidense.

Este homenaje tiene lugar cinco meses después de que el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz decidiera procesar por tercera vez a tres militares norteamericanos -el teniente coronel Philip de Camp, el capitán Philip Wolford y el sargento Thomas Gibson- por un delito contra la comunidad internacional, en concurso con un delito de homicidio, por la muerte de Couso el 8 de abril de 2003.

Pedraz llega a la conclusión, en un nuevo auto hecho público este miércoles de que el cámara murió como consecuencia de un plan norteamericano orquestado para evitar que los medios de comunicación informaran sobre la operación norteamericana desplegada en la capital iraquí.

Así lo recordó el hermano del fallecido, Javier Couso, en el discurso pronunciado ante la sede diplomática estadounidense. "Mi hermano fue asesinado por ser periodista y por contar las cosas que Estados Unidos no quería que contara", denunció.

Javier Couso reivindicó la soberanía española para defender la competencia del juez Pedraz para investigar el asesinato de su hermano, que calificó de "crimen de guerra", y acusó a Estados Unidos de exhibir un comportamiento "igual que el de las SS", según declaraciones recogidas por Europa Press.

"La familia de Couso continúa con su reclamo de investigación y justicia para que se aplique la legalidad internacional y se juzgue a los responsables", aseguró.

Al acto acudieron personalidades como el actor Juan Diego Botto y los escritores Luis García e Isaac Rosa, así como la madre de José Couso, Maribel Permuy. La conmemoración también contó con las actuaciones del cantautor Luis Ramiro y el grupo Samba da Rua.