Un centenar de 'indignados' ha echado abajo las dos puertas del edificio ubicado en el número 33 de la calle Concepción Jerónima, muy cerca de otra vivienda que se encuentra 'okupada', y ha entrado en su interior, donde han comprobado que incluso la instalación tenía energía eléctrica. Sin embargo, a los 30 minutos han decidido abandonar las instalaciones porque no les convencían al estar en obras.

En un primer momento, se han quedado a las puertas del edificio para valorar los siguientes pasos a dar mientras uno de los 'okupas' era atendido por miembros del Samur. Una vez dentro del inmueble, uno de ellos se ha asomado al balcón del segundo piso y el resto han respondido gritando una de sus principales consignas: 'Casa okupada, familia desahucia'.

Pese a parecer en un primer momento que se iban a quedar establecidos en el inmueble y después de proclamarlo, a los 30 minutos han decidido abandonarlo debido a que no les convencía su estado, ya que se encontraba en obras.

No obstante, han retirado el cartel de 'Se vende' que había en el edificio y han colgado de su fachada dos pancartas: una en el segundo y otra en el tercer piso.

De este modo ha concluido una marcha que se ha prolongado por espacio de tres horas y que ha transcurrido por Preciados, Gran Vía, Cibeles, Paseo del Prado y calle Atocha y que a su llegada a Sol ha sido frenada por agentes de policía.

En ciertos momentos de la marcha, algunos 'indignados' han intentado echar abajo a patadas las puertas de dos edificios de la calle Atocha a la altura de Antón Martín.