El presidente del Congreso, José Bono, ha dado hoy de plazo al PSOE y al PP hasta el 30 de junio para ponerse de acuerdo para renovar a los magistrados del Tribunal Constitucional que corresponden a esta Cámara.

Ha sido muy crítico con la situación de falta de acuerdo entre los grandes partidos para renovar el TC, tres de cuyos magistrados presentaron ayer su dimisión, que finalmente no fue aceptada por el presidente del alto tribunal.

"Es la séptima vez que en la Junta de Portavoces les hago ver que en nuestro sueldo está cumplir con nuestra obligación de designar a los magistrados del TC que nos corresponde por mandato", ha subrayado Bono.

Según ha explicado, esta mañana ha propuesto a la Mesa del Congreso abrir el plazo para presentar candidatos, lo que ha sido aceptado por el órgano rector de la Cámara.

Preocupado por la "obstinación con la que casi a diario los grandes partidos políticos se dan la espalda", Bono ha considerado que "no es bueno" que los magistrados que han cumplido ya con su mandato no puedan ser renovados.

Así las cosas, ha dejado claro que PSOE y PP deberían ponerse de acuerdo. "Y si no, estamos incumpliendo nuestras obligaciones", ha advertido, antes de hacer notar que "a veces es más fácil criticar a los magistrados que nombrarlos".

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Jáuregui, en declaraciones a Antena 3, se refería así, tanto a la renovación de varios magistrados del Tribunal Constitucional -tres de ellos intentaron renunciar ayer por su situación de interinidad-, como a los relevos pendientes en el Tribunal de Cuentas, Defensor del Pueblo o parte del Consejo de RTVE.

"Es un argumento de partido que puedo comprender pero que no es institucionalmente aceptable", ha añadido el ministro, quien ha subrayado que, por ello, el acuerdo no va a ser fácil.

Ha vuelto a situar las dificultades para la renovación de las vacantes del Tribunal Constitucional en la insistencia del PP en defender la candidatura de Enrique López, anterior portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y de quien el Senado dijo que no cumplía los requisitos para ser elegido.

No obstante, Jáuregui ha asegurado que la situación creada tras la renuncia -rechazada por el presidente del TC- de los magistrados del Constitucional Eugeni Gay, Javier Delgado y Elisa Pérez no supone "ningún caos", ya que, aunque los partidos deben atender esa llamada de atención, mientras tanto el tribunal sigue funcionando y dictando sentencias con normalidad.

El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, ha reconocido la parte de culpa que tiene su partido en la situación por la que atraviesa el Tribunal Constitucional tras la renuncia de tres magistrados aunque ha denunciado una "clarísima coacción" de estos jueces.

"El Tribunal Constitucional no debe coaccionar al Congreso ni al Senado. En términos políticos es una clarísima coacción, ya que si querían irse podrían haberlo hecho antes de la legalización de Bildu", ha explicado en declaraciones a la Cope recogidas por Europa Press.

Pons ha reconocido que el PP "no ha sido capaz de dialogar" con el Gobierno para renovar el Constitucional y que éste "no ha querido" hacerlo con el principal partido de la oposición. Asimismo, ha señalado que los magistrados también son "responsables" de su situación que, en definitiva, ha achacado al "caos institucional, el desgobierno y la falta de liderazgo" que vive España.

Esta situación, ha continuado, se ha hecho evidente en el poder obtenido por Bildu tras las elecciones del 22 de mayo. En este punto, ha criticado que esta formación gobierne el ayuntamiento de San Sebastián y que "controle" a la policía de esta ciudad ya que, ha dicho, "puede volvernos al principio de ETA". "Si ETA está vencida o no después de que Bildu entre a dirigir el ayuntamiento de San Sebastián depende un poco más de ETA que de nadie", ha enfatizado.