El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha mostrado hoy su "convicción" de que la sostenibilidad del Estado del bienestar sólo se podrá garantizar si "se siguen acometiendo las oportunas reformas económicas, del modelo productivo y del propio modelo social".

En el primer pleno monográfico sobre las políticas sociales que se celebra en el Congreso, Zapatero ha considerado que las prioridades para el futuro deben ser la educación, la conciliación, la vivienda y la sanidad, y ha hecho hincapié en que para expandir el Estado del bienestar es necesario un crecimiento económico "sostenible y sostenido".

"Cuanto mayor sea el vigor y la profundidad de las reformas para mejorar nuestra competitividad, mayores serán las posibilidades de consolidar y mejorar" las políticas sociales, ha subrayado el jefe del Ejecutivo, quien se ha puesto como reto alcanzar a los países europeos más avanzados, como Finlandia, Suecia o Alemania.

La máxima prioridad del Gobierno seguirá siendo la protección de los desempleados -que hoy alcanza al 80 por ciento-, ya que las cifras de paro, ha reconocido, son "durísimas".

Zapatero ha repasado los avances logrados en los últimos treinta años, como la universalidad de la sanidad o la educación obligatoria, y los logros de las dos últimas legislaturas, pero ha advertido que aún queda "un largo camino por recorrer", ya que el gasto social español en relación con el PIB sigue cinco puntos por debajo de la media europea.

En este contexto ha subrayado que los recortes aprobados el año pasado y que afectan a funcionarios y pensionistas eran "excepcionales e imprescindibles" y ha lamentado decisiones como el retraso en la ampliación del permiso de paternidad o la supresión del cheque bebé: "siento no haberlo podido aplicar a los niños que están naciendo este año".

No obstante, ha elogiado la actual protección social en España, y lo ha ejemplificado con la biografía ficticia de un ciudadano desde el momento en que nace, y sus padres pueden cuidarlo gracias a los permisos laborales, hasta que se jubila y cobra la pensión.

Al defender las reformas en marcha, ha apostado por una nueva "agenda social", ha pedido el apoyo de los grupos parlamentarios y ha enmarcado en ella el Acuerdo económico y social suscrito con sindicatos y empresarios, que incluye la reforma de las pensiones y de las políticas activas de empleo.

Ha destacado además la necesidad de mejorar el sistema educativo, reduciendo la cifra "inaceptable" de abandono escolar prematuro del actual 31 por ciento al 15 por ciento en 2020; promocionando el talento con apoyo al alumnado con más capacidad y motivación; ampliando la excelencia e internacionalización de las universidades; y reformando la formación profesional.

El segundo reto, a su juicio, debe ser avanzar en la conciliación laboral y familiar, para lo que se tiene que completar la cobertura de la educación pública de 0 a 3 años y mejorar el sistema de atención a la dependencia a través de la racionalización de horarios.

Zapatero no ha olvidado mencionar la necesidad de mejorar la atención a las familias monoparentales y mantener la igualdad de trato hacia todas las formas de familia.

Para el tercer desafío, el acceso a una vivienda digna, ha abogado por mantener la promoción de vpo en alquiler y las políticas de rehabilitación, a las que contribuirá la Ley de calidad y sostenibilidad del medio urbano que se presentará próximamente.

La cuarta prioridad de la nueva agenda social, ha añadido el presidente del Gobierno, debe ser mantener la calidad del sistema sanitario y asegurar su sostenibilidad ante el reto del envejecimiento.

Zapatero se ha declarado comprometido con el Estado del bienestar y sus valores "hasta el punto de que este compromiso da sentido", ha dicho, a su propia vocación política.