Los expertos vaticinan una primavera "intensa" para los alérgicos al polen de gramíneas, ya que su presencia en el aire casi se duplicará con respecto a 2009, debido a las abundantes lluvias de principios de este año.

El coordinador del Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Inmunología Clínica (SEAIC), Javier Subiza, ha señalado hoy, en rueda de prensa, que las concentraciones acumuladas de polen de gramíneas, que aparecen en abril, mayo, junio y julio, superarán los 5.100 granos por metro cúbico de aire, frente a los 2.800 de 2009.

Subiza ha afirmado que la pluviosidad de septiembre, octubre y noviembre ha estado muy por debajo de la media registrada en años anteriores, pero en diciembre, enero y febrero de 2010 la pluviosidad ha duplicado las cifras del pasado ejercicio.

El doctor Tomás Chivato, jefe clínico del Servicio de Alergia del Hospital Central de la Defensa "Gómez Ulla" de Madrid y presidente de la SEAIC, ha apuntado que los que peor lo pasarán serán los alérgicos de la "España seca", es decir, quienes residan en Madrid, Castilla La Mancha, Extremadura y el norte de Andalucía.

Como medida preventiva, los alergólogos recomiendan que el enfermo acuda al médico antes de adentrarse en pleno periodo de polinización y manifestar síntomas. Chivato ha aconsejado que los afectados no permanezcan en parques, jardines o zonas de abundante vegetación, evitando especialmente el césped.

El polen se libera únicamente durante el día y por la noche disminuye su concentración, que llega a ser alta de cinco a diez de la mañana, debido al efecto de inversión térmica nocturna. De ahí que sea conveniente cerrar las ventanas de la habitación y mantenerla en la penumbra la mayor parte del día y, por último, tener en cuenta que los días secos y calurosos son los que tienen mayor acumulación de pólenes, sobre todo si vienen tras una lluvia.