La nueva prueba médica realizada ayer por la tarde al pirata detenido por el secuestro del atunero español "Alakrana" y al que el martes dejó en libertad el juez Santiago Pedraz ha determinado que el joven tiene una edad superior a 18 años, según fuentes jurídicas.

A la vista de este resultado, la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que ayer acordó el internamiento en un centro de menores de régimen cerrado, devolverá el caso del joven somalí Cabdiweli Cabdullahi, "Abdu Willy", al Juzgado de Pedraz, que el martes acordó su inmediata puesta en libertad tras determinar, mediante otras pruebas, que tenía una "edad mínima" de 17 años.

Las mismas fuentes han explicado que ahora el fiscal dictará un decreto para poner al joven a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 1 y que se continúen instruyendo ahí las diligencias abiertas a raíz de la detención de "Abdu Willy" y "Raageggesey Adji Haman", que se produjo dos días después del secuestro del "Alakrana". La ortopantomografía, una prueba radiológica de la dentadura, para determinar su edad del joven, se le realizó ayer. Además de esta prueba, se le realizaron nuevas radiografías óseas que han determinado que el somalí "tiene una edad superior a 18 años", han detallado las fuentes consultadas.

Por su parte, Abdi Madobe, un cabecilla pirata que aseguró que estaba al cargo de la vigilancia del barco español, dijo a Efe por un teléfono satélite y a propósito de la situación de Abdu Willy que"este chico es nuevo en la piratería, por lo que no es una pérdida para nosotros, aunque sí para su familia, y lo que queremos es la liberación de nuestro compañero que aún está en prisión".

Desde Elhur, 60 kilómetros al norte de Haradhere, donde está el cuartel general de los piratas, Madobe repitió las exigencias a las autoridades españolas de que "liberen a nuestros compañeros y eviten cualquier acción militar, pues si no cumplen estas condiciones, su gente sufrirá las consecuencias".

Por otro lado, fuentes locales informaron de que los piratas han empezado a tomar medidas de seguridad para evitar un ataque para liberar a los tripulantes del "Alakrana" y amedrentar a la población de Haradhere y Hobyo para que no colabore en una eventual acción contra ellos.