Casi 1,8 millones de euros. Éste fue el saldo en negativo que dejó Pablo Crespo, en prisión acusado de ser "el segundo" de la trama de corrupción Gürtel, cuando abandonó la Secretaría de Organización del PPdeG en septiembre de 1999. La nueva dirección de los populares gallegos detectó "las irregularidades" y hubo de "hacer frente" al pago de "las deudas millonarias" contraidas, pero no saldadas por Crespo "con diferentes proveedores", según ha podido saber este diario.

Sin embargo, hubo un débito que no se saldó. Fueron los 300.00 euros que exigía Special Events, precisamente una de las empresas de la red de Francisco Correa, por los trabajos para la organización de una campaña electoral. Sociedades de la trama Gürtel se encargaron de los mítines del PPdeG en los comicos gallegos de 1997, en los municipales de 1999 y de los actos de José María Aznar, por orden de la dirección nacional del PP, en las elecciones autonómicas de 2001. Precisamente la amistad que se selló entre Crespo y Correa en este periodo permitió al primero dar el salto a Madrid cuando se frustró su carrera en el PPdeG.

El ex político pontevedrés, que "fue invitado a marcharse", sólo dejó acreditado un déficit. Firmó una declaración jurada en la que como número tres del PP gallego reconocía el débito de 300.000 euros a Special Events, pero en el documento no se justificaba el gasto, por lo que Jesús Palmou, que relevó a José Cuiña al frente de la Secretaría General del PPdeG y prescindió de Crespo en el área de Organización, al descubrir sus tropelías, acordó no hacer frente a esta obligación.

La decisión de Palmou irritó a Álvaro Pérez, el Bigotes, otro de los imputados en la trama Gürtel, tanto que ante la negativa del PP gallego, envió misivas exigiendo el pago de los 50 millones de pesetas a Luis Bárcenas, ahora ex tesorero del PP, a Javier Arenas, entonces secretario de Organización del PP, y al propio Mariano Rajoy, en diciembre de 2003, tres meses después de que fuese elegido secretario general del PP. Sus presiones en Madrid no fructificaron. Los populares gallegos no soltaron la pasta.

El PPdeG sí liquidó sus obligaciones con los restantes proveedores, después de comprobar que en "la mayoría de los casos" los pagos exigidos estaban debidamente justificados. "Hubo que pagar", admiten fuentes populares.

"Problema jurídico"

Este ´pufo´ no fue el único que pudo haber cometido Pablo Crespo cuando era el hombre de confianza en el PPdeG de José Cuiña, quien lo llegó a calificar de "oro molido" cuando recomendó su fichaje a Francisco Correa, el cabecilla de la trama Gürtel. Así consta en la declaración de éste último ante el juez, cuando se le pregunta cómo conoció a Crespo.

El propio ex político pontevedrés, en una conversación con su mujer grabada por orden judicial durante su estancia prisión, admite que se puede "montar un lío morrocotudo" con la documentación que se le incautó en una caja de seguridad en Pontevedra, donde guardaba las finanzas del PP gallego entre 1996 y 1999, periodo en que él era el responsable de las cuentas del partido.

Es más, en una charla con su abogado, también registrada, Crespo manifiesta su preocupación por si en esa documentación descubren algún "problema jurídico" y pregunta a su letrado cuando prescriben los delitos, a lo que éste le responde que si son de financiación irregular "como mucho a los diez años."

Por lo que se sabe hasta ahora de la investigación, pues aún no se ha levantado todo el secreto de sumario de la trama Gürtel, en el depósito de seguridad de Pontevedra hay documentos que demuestran una doble contabilidad en el PP gallego entre 1996 y 1999. En ese periodo, Pablo Crespo manejó mil millones de pesetas, de los cuales 536 millones eran en B, y de éstos había recibos para 439 millones, pero luego también se constatan "entregas sin recibo por 97,2 millones de pesetas". Todas estas cifras son las que se barajan en la investigación judicial y policial. Son un primer adelanto de lo que está por venir, ya que el contenido íntegro de la documentación incautada en Pontevedra aún no ha sido desvelado, pues todavía está siendo objeto de investigación y análisis, y, por ello, forma parte del secreto del sumario.¿Quién puso esos fondos o quien se llevó el dinero en negro? Éstas son las incógnitas a despejar, y que pueden abrir una nueva vía de actuación en la trama Gürtel.

Crespo, en sus conversaciones desde prisión, en Soto del Real, en Madrid, anuncia que cuando se hagan públicos los papeles de su etapa en el PPdeG habrá para "una semana de portadas" porque se va a considerar "algo muy espectacular". El ex político gallego también advierte de que las repercusiones serán sólo mediáticas, pues "indicios podrán encontrar. Ahora, la prueba de eso nada".