Llamazares se ha mostrado muy molesto con la decisión de la alcaldesa, con quien ayer mantuvo una conversación para "intentar disuadirla", y ha recalcado que es "un error" desde punto de vista personal y no tiene ninguna justificación desde el punto de vista político.

Ahora será la dirección de IU la que decida si Rosa Aguilar debe abandonar o no la federación, pero Llamazares tiene claro, según ha dicho a los periodistas en los pasillos del Congreso, que alguien que, "de forma personal", pasa a integrar un gobierno de mayoría absoluta, como es el caso del andaluz, y lo hace con la opinión en contra de su partido, "desde luego, lo pone muy complicado".

"No entiendo su decisión, no la comparto", ha afirmado el diputado de IU, quien también le ha echado en cara que no culmine su labor municipal en Córdoba.

Para Llamazares, Rosa Aguilar "se debe" a IU, que incluso, ha recordado, votó en contra de la investidura del nuevo presidente de la Junta, Antonio Griñán.