La excarcelación de Jiménez, que desde mayo del año pasado permanecía en la prisión de Alcalá-Meco, tendrá lugar esta misma tarde, ya que su defensa ha abonado ya la cantidad exigida como fianza, según ha confirmado a Efe su abogado, Oskar Zein, que ha añadido que ya había comunicado la noticia al ex jefe de Policía de Coslada y que éste estaba "muy contento".

El titular del Juzgado de Instrucción número 21 de Madrid ha estimado el recurso de reforma que Zein interpuso contra el auto de prisión de Jiménez que el magistrado dictó el 12 de mayo de 2008.

En aquella ocasión, el juez tenencia imputó a Ginés Jiménez los delitos de tenencia de armas, extorsión y delitos contra la Administración pública como prevaricación y cohecho, al considerarle responsable de una trama de corrupción cuyos miembros extorsionaban a los propietarios de locales de ocio de Coslada.

Posteriormente, el ex jefe de la Policía local declaró como imputado en relación con un delito de blanqueo de capitales derivado de las investigaciones de la "operación Bloque".

Ahora, el magistrado ha tenido en cuenta el año que Jiménez lleva en prisión preventiva, el estado de la instrucción de la causa, las diligencias practicadas y las que quedan por practicar y los delitos imputados y la pena que en su caso pudiera corresponderle y ha acordado dejarle en libertad provisional.

Ginés Jiménez Buendía fue jefe de la Policía local de Coslada durante 22 años, durante los que se prodigó en los medios y se enfrentó a concejales de Seguridad y alcaldes, llegando a ser considerado "intocable".

Nacido en Alcantarilla (Murcia) hace 53 años, casado y padre de dos hijos, Jiménez se convirtió en 1986 en oficial jefe de la Policía Local y desde entonces mantuvo desencuentros con todos los concejales de Seguridad, siendo sancionado con suspensión de empleo y sueldo en varias ocasiones entre 1999 y 2003.

En enero de 2003 la Audiencia de Madrid le absolvió de los tres delitos de detención ilegal de los que estaba acusado al considerar el tribunal que no se había acreditado que participara en el arresto de tres personas en marzo de 1995.

Vecinos y políticos de Coslada aseguraron tras su detención que "nada pasaba sin que él lo controlara y decidiera lo que había que hacer".

En declaraciones a los periodistas en una de sus comparecencias judiciales, él dio otra versión: "Soy autoritario, pero no un delincuente".