El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, se mostró ayer contrario al derecho a huelga de los jueces y confió en que, después de haber puesto a cero el contador de las relaciones entre su ministerio y este colectivo, logrará un acuerdo que evite el paro anunciado por las principales asociaciones del sector para el próximo mes de junio. Además, sobre la reforma del Código Penal, adelantó que será remitida al Congreso de los Diputados próximamente y que contará con tipos penales “de nuevo cuño” en la Unión Europea (UE) como la “ciberdelincuencia” o los delitos de las personas jurídicas.

“En una de mis primeras manifestaciones públicas dije que ponía el contador a cero en cuanto a la relación y al nuevo ánimo que quería entre el ministerio y las asociaciones de jueves”, aseguró durante un desayuno informativo el ministro, quien añadió que lo que le importaba “no era lo ocurrido antes, sino trabajar por el futuro con lealtad”. Por ello, tras haber iniciado las relaciones, Caamaño se mostró convencido de que “con voluntad, llegaremos a un acuerdo”.

Si no se alcanzara un acuerdo y finalmente se produjera este paro, se trataría de la segunda jornada de huelga después de que los jueces protestaran de manera inédita el pasado 18 de febrero demandando mayores inversiones en la Administración.

Precisamente ante la pregunta sobre el derecho de huelga de los jueces, Caamaño manifestó que, a su juicio, el Poder Judicial no está amparado por este derecho. “La Constitución reconoce el derecho de huelga de todos los trabajadores, pero más adelante nos dice que los jueces no tienen libertad sindical. En mi opinión, deben ser, o bien los jueces, o el legislador, quien resuelva esta controversia”, explicó el ministro en su primer acto informativo desde que accedió al cargo el pasado 24 de febrero, tras la dimisión de Mariano Fernández Bermejo.

“A mí me resulta difícil, si no imposible, que el Poder Judicial tenga este derecho”, sentenció.