Ésta ha sido la postura que ha puesto de relieve el portavoz del PNV, Josu Erkoreka, tras escuchar al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y ha señalado que "se podía haber hecho más y mejor" para salir de la crisis y, además, "el compromiso de los Estados está siendo tan heterogéneo" con los planes para que se recupere la economía que "su efectividad se reduce".

Una de las conclusiones de esta cumbre que más ha criticado Erkoreka es que a cambio del compromiso del Gobierno irlandés de conseguir la ratificación del Tratado de Lisboa mediante un nuevo referéndum, los 27 renuncian a que se disminuya el número de miembros de la Comisión Europea para lograr un órgano "más eficaz y más europeísta".

Una valoración también con luces y sombras ha hecho el portavoz de ERC-IU-ICV, Joan Ridao, quien ha expresado su preocupación porque el plan de 200.000 millones de euros para hacer frente a la crisis no fuera aprobado por unanimidad y, "una vez más", el Consejo haya dejado que sea cada Estado el que decida al respecto.

Ha defendido la flexibilidad en los requerimientos del Pacto de Estabilidad y ha calificado de "asignatura pendiente" que las ayudas económicas a los bancos no hayan impulsado la llegada de dinero a los ciudadanos y a las empresas.

Desde CiU, su diputado Pere Macías ha subrayado que en el Consejo Europeo quedó claro que Europa "tiene un plan" para combatir la crisis, pero "nosotros no".

Así, ha considerado que la política económica ha de tener un equilibrio, "no se puede improvisar cada semana un conjunto nuevo de medidas", y por ello ha reivindicado una estrategia "global, de legislatura", contra la crisis y un plan de reactivación económica para España, algo que, a su juicio, no permiten los Presupuestos Generales del Estado para 2009.

Macías ha advertido también de que el Gobierno debe apostar, como lo ha hecho el Consejo Europeo, por la investigación y la innovación, porque "para salir de la crisis no es suficiente con aumentar la inversión pública en trenes, carreteras y equipamientos urbanos".

El diputado de IU Gaspar Llamazares ha criticado que la cumbre europea "no haya estado a la altura" de dar respuesta a la crisis, porque "está encerrada entre el dogma del neoliberalismo y sus problemas internos de gobernanza".

Llamazares también ha acusado al Gobierno de Zapatero de reconocer la existencia de la crisis de manera "tardía", y ha criticado que siga "empecinado" en considerar que es una coyuntura sólo internacional, "sin reconocer la gravedad de nuestro modelo económico".

Críticas a la "ausencia de políticas decididas" en el sector financiero se han escuchado desde el Grupo Mixto y, en concreto, el diputado del BNG Francisco Jorquera ha dicho que la UE se ha limitado a pedir a los bancos "que sean buenos" en lugar de intervenir para recuperar "la lógica del servicio público".

Sólo el portavoz socialista, José Antonio Alonso, ha hecho una defensa sin fisuras de los resultados de la cumbre, ha subrayado el papel desempeñado por la presidencia francesa "por su avance político, económico e institucional" y ha elogiado la labor desempeñada por la UE al actuar de manera "unida y coordinada" para combatir la mala situación económica.