Los acusados, que serán juzgados por el juez central de lo Penal, José María Vázquez Honrubia, se enfrentan, respectivamente, al pago de una multa de 10.800 euros por haber imputado al Rey "el carácter de alcohólico", según defiende en su escrito provisional de acusación el fiscal Pedro Rubira.
En el fotomontaje publicado aparecía una imagen del Rey junto a un oso muerto apoyado en un barril de licor con la leyenda 'Bodegas Caza-Illa, para sentirse como un Rey'. Se acompañaba con un rótulo en el que podía leerse: "Mitrofan era un oso de feria, le metieron en una jaula y lo pusieron a tiro del Rey tras emborracharlo con vodka y miel".
` En cuanto al artículo, aparecido bajo el título de 'Las tribulaciones del oso Yogi', incluía expresiones como "soberano irresponsable" y advertía de que era mejor esconder los osos de peluche de Froilán, el nieto del monarca, para que éste "no la emprendiera a tiros con ellos".
EXPRESIONES OFENSIVAS Y DE MENOSPRECIO
El representante del Ministerio Público sostiene que las expresiones utilizadas por los humoristas fueron "ofensivas, impropias, injustas y oprobiosas", al tiempo que "expresan un evidente menosprecio a S.M. el Rey y a la institución que representa".
En su opinión, estas manifestaciones no pueden ampararse en el ejercicio de la libertad de expresión porque tienen un carácter "absolutamente innecesario" y superan "con mucho" lo que podrían considerarse "críticas hirientes, molestas o desabridas".
La causa fue reabierta en junio pasado por la Sección Tercera de la Sala de lo Penal, que preside el juez Alfonso Guevara, después de que en abril pasado el instructor Fernando Grande-Marlaska dictara su archivo.
OTROS DOS JUICIOS
La Sección Primera de la Sala de lo Penal también juzgará el próximo jueves al etarra José Carlos Apesteguia Jaca por un delito de amenazas terroristas. El fiscal Jesús Alonso solicita que sea condenado a dos años de cárcel por intentar atemorizar a un grupo de funcionarios de la prisión de Huelva, a los que el 22 de junio de 2006 apuntó con el dedo índice y el pulgar levantado simulando una pistola.
Mientras realizaba este gesto, que repitió moviendo la mano hacia delante y hacia atrás, el preso espetó a los funcionarios expresiones como "Vale de tonterías", "No te preocupes, si no está cargada, esto es sólo un dedo, no es mi pistola" y "No sabéis con quién os metéis".
El martes la Sección Segunda juzgará a Ana Isabel López Monge, que se enfrenta a una pena de diez años de cárcel por un delito de colaboración con banda armada y depósito de explosivos. Según el fiscal Pedro Martínez, la acusada guardó en un piso de Bilbao el material con el que los etarras Hodei Galarraga y Egoitz Gurruchaga pretendían cometer atentados. Los dos terroristas fallecieron el 23 de septiembre de 2002 cuando hizo explosión un artefacto que se disponían a colocar en la capital vizcaína.
