Hasta las últimas elecciones generales, el CIS venía preguntando a sus encuestados por los líderes de PSOE, PP, CiU, PNV, IU, ERC e incluso Coalición Canaria, pero en esta nueva legislatura decidió poner un umbral mínimo, lo que redujo la lista a cuatro políticos: José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE), Mariano Rajoy (PP), Josep Antoni Duran i Lleida (CiU) y Gaspar Llamazares (IU).

Aquella decisión irritó especialmente a la diputada de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, que quedó fuera de ese umbral pese a que su partido, de ámbito estatal, ronda ya el 3 por ciento de los votos en las propias encuestas del CIS.

Tras la polémica, el CIS se comprometió a dar marcha atrás y el PSOE anunció una proposición no de ley para que en el listado se incluyan a los líderes de las formaciones con representación parlamentaria.

Ahora ERC incide en la cuestión con otra proposición no de ley dando un paso más. A su juicio, el CIS no sólo debe preguntar por el Gobierno y el primer partido de la oposición, sino por la gestión política de todas las formaciones parlamentarias y por la imagen de su portavoz en el Congreso y la del líder político que el propio partido elija.

Esta propuesta, junto con la presentada por el PSOE, se debatirá en una próxima reunión de la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados. El CIS elaborará en enero su siguiente barómetro de opinión con intención de voto, que será dado a conocer en febrero, y ahí podrían a empezar a figurar los líderes de las formaciones minoritarias.