Bono realizó esta afirmación en los Desayunos Informativos organizados por Europa Press, en los que recordó que el próximo mes de diciembre cumplirá 58 años, lo que le lleva a afirmar, "con más fuerza que en otras ocasiones", que, "como en los antiguos juzgados, que los había de término y de asenso", para él su tarea actual es "un punto de término".

Además, aprovechó para subrayar que la Presidencia de la Cámara Baja es una de las responsabilidades "más honrosas que puede tener un político español en la democracia". "Me siento muy honrado y agradecido", apostilló.

El político socialista admitió que cuando dejó el Ministerio de Defensa creyó que abandonaba "la primera línea política para siempre". Sin embargo, comentó que cambió su decisión cuando el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le ofreció ser diputado para después proponerle como presidente de la Cámara, una propuesta ante la que se sintió "extraordinariamente honrado" y que le hizo reconsiderar su vuelta a la política activa.

Asimismo, dejó claro que ahora siguen siendo válidas las razones que dio a Zapatero para rechazar ser candidato a la Alcaldía de Madrid. Tras recordar que entonces alegó que no aceptaba la oferta porque sería "imperdonable" aspirar a gobernar una ciudad en la que ni ha nacido ni tiene su residencia, remachó: "Después de algún tiempo, las explicación que le di valen ahora".

NO TIENE QUE COINCIDIR "MILIMÉTRICAMENTE" CON PAJÍN

En cualquier caso, Bono volvió a hacer gala de su militancia en el PSOE, al que se afilió en 1969, y en el que quiere seguir "mientras viva". Eso sí, aprovechó para explicar que eso no significa que "tenga que pensar milimétricamente" lo mismo que la secretaria general del partido, Leire Pajín, una de la pocas representantes socialistas presentes en el acto.

En otro momento del coloquio, a Bono se le preguntó si continúa teniendo la intuición de que Zapatero no optará a un tercer mandato en 2012. Al principio, rehusó contestar recurriendo a una cita de Baltasar Gracián: "Es prudente resolver los problemas que entran en tu casa, pero imprudente salir a la calle a buscarse problemas, y yo --puntualizó-- ya me he buscado bastantes".

Pero cuando se le invitó a decir a quién le gustaría ver como cartel electoral del PSOE si Zapatero decide no repetir, sí animó a subrayar que, en su opinión, la sucesión no está abierta. "Niego el supuesto de que esté abierta la sucesión a la Presidencia del Gobierno, porque ni hay elecciones ni en el PSOE imaginamos un mejor candidato que el presidente del Gobierno", zanjó.

Tampoco quiso detallar, alegando que no sabía "nada" de ello, más allá de lo que se ha publicado, si veía próxima una hipotética remodelación del actual Gabinete de Zapatero, de la que se ha empezado a hablar a raíz de que el jefe del Ejecutivo anunciara la creación de un Ministerio de Deportes.

ZAPATERO, EL QUE "MEJOR QUEDA" EN CATALUÑA

Bono sí respondió a una afirmación del ex presidente de la Generalitat catalana, Pasqual Maragall, quien ha afirmado que entre Montilla y Zapatero le echaron de la política. El presidente del Congreso afirmó que no ha coincidido siempre con Maragall en las opiniones, pero sí en los afectos y que ahora esta circunstancia se da "tanto o más que antes".

"Maragall tiene el respeto del PSOE y desde luego tiene el mío", agregó, para negar a continuación que el ex presidente catalán haya sido injustamente tratado por Zapatero. Para avalar esta percepción, se refirió a los resultados electorales en Cataluña: "Cuando los catalanes votan en secreto y ante ellos mismos, el presidente del Gobierno no solamente no queda mal, sino que es el que mejor queda de todos. Esto hay que decirlo porque es verdad, desmerecimientos así los querríamos todos", resumió.