Don Juan Carlos y doña Sofía, que fueron despedidos en Tokio por sus anfitriones, los emperadores Akihito y Michiko, se trasladaron en el "tren bala" a la capital cultural japonesa, que tiene como símbolos la camelia, la azalea y el cerezo y que es patrimonio de la Humanidad.

Durante el viaje, don Juan Carlos y doña Sofía pudieron ver el volcán inactivo Fuji cubierto de nieve, que se encuentra en la cadena montañosa conocida como "los Alpes Japoneses" y se eleva entre el humo de las chimeneas de las fábricas y el permanente paisaje de construcciones de hormigón.

Los Reyes fueron recibidos en la estación de Kioto, a unos 500 kilómetros al oeste de Tokio, por el embajador de la región de Kansai, Satoshi Hara, y una gran cantidad de ciudadanos locales y algunos españoles, que esperaban su llegada y les saludaron.

Esta tarde los Reyes irán a la universidad privada de estudios extranjeros, una de las mas importantes del país, en la que se creó el departamento de español en 1963.

Ademas, las autoridades locales ofrecerán esta noche una cena en honor de los Reyes en el Palacio de Huéspedes y mañana, antes de emprender el regreso a España, visitarán el palacio de Sentou Gosho y el museo Miyako Nesse.