Con gritos de "viva ETA" y resistiéndose a los agentes a la hora de entrar en el coche. Así salía de comisaría pasadas las diez de la noche Ugaitz Astiz Arangoa, uno de los dos supuestos terroristas detenidos ayer a mediodía en el sur francés. Tanto él como el otro arrestado, Mikel Olza Puñal, se han negado a declarar ante la policía antes de ser trasladados a Toulouse.

Entre los enseres incautados a los etarras están el revólver y la pistola ametralladora que guardaban en sus mochilas.Las llevaban encima mientras circulaban en bicicleta por esta carretera del Pirineo francés. Aquí eran detenidos por sorpresa en un control de la gendarmería. Fue la escasa información que pudieron sacarles los agentes en el momento del arresto.

Mikel Olza y Ugaitz Astiz llevaban 10 días durmiendo en el monte. Como equipaje, además de sus armas, una tienda de campaña y unos sacos de dormir. Según fuentes de la lucha antiterrorista los detenidos preparaban el robo de un vehículo y eran miembros del comando Urederra, una extensión del complejo Donosti desarticulado en marzo del año pasado.