Don Juan Carlos, acompañado por la Reina, asistió esta noche a la cena de gala que ofrecieron en su honor en el Palacio Imperial los emperadores Akihito y Michiko, en la que el jefe de la familia imperial japonesa expresó sus condolencias a España por la muerte de dos soldados, ocurrida ayer en un atentado en Afganistán.

Don Juan Carlos agradeció las palabras del emperador, para asegurar que tanto España como Japón tienen una "especial sintonía política en grandes asuntos internacionales, como la reducción de la pobreza, la lucha antiterrorista, la energía, el cambio climático" o el entendimiento entre los pueblos, culturas y religiones.

En ese contexto y ante la situación económica actual, Juan Carlos habló de la necesidad de cooperar a todos los niveles para superarla y así fortalecer un orden internacional más justo.

Don Juan Carlos, que calificó el momento de las relaciones entre España y Japón de "histórico" coincidió con el emperador en recordar la numerosas veces que se han encontrado desde que los Reyes viajaron por primera vez al archipiélago japonés en 1962, durante su viaje de novios.

Más de cien invitados, la mayoría de las japonesas ataviadas con kimono -vestido tradicional japonés-, asistieron a la cena de gala en la que estuvo también el príncipe heredero, Naruhito, aunque sin su esposa Masako.

La esposa del heredero al trono del imperio del Sol Naciente asistió esta mañana por primera vez al recibimiento de un jefe de Estado extranjero desde que hace cinco años estuvo en la bienvenida al entonces presidente de México, Vicente Fox.

La jornada de hoy -Los Reyes llegaron ayer a Tokio para una visita de Estado de seis días- ha tenido un marcado carácter económico, pues si en la cena Don Juan Carlos se refirió a la necesidad de la cooperación internacional para enfrentar la actual situación financiera, por la mañana clausuró un encuentro empresarial España- Japón.

El Rey Juan Carlos ofreció a 450 empresarios japoneses la "privilegiada posición geoestratégica de España como plataforma de negocios" hacia el resto de Europa, Iberoamérica y norte de África.

En las palabras que dirigió a los asistentes al Foro, en el que estaban también representantes de cuarenta empresas españolas, el Rey aseguró que una cooperación positiva entre los dos países permitirá "sentar las bases de empresas mixtas, descubrir oportunidades de inversión y multiplicar posibilidades de cooperación".

En estos momentos en que Japón es la segunda potencia mundial y España la octava, las relaciones económicas son más bien escasas, aunque en el encuentro se puso de relieve que los japoneses están muy interesados en los productos agroalimentarios españoles, sus entidades financieras y en los sectores de servicios y energías renovables.

Mientras Don Juan Carlos clausuraba el encuentro empresarial, la Reina asistió a una representación del teatro tradicional kabuki, que narraba una historia de amor e intriga sobre la época samurai.

Los Reyes inaugurarán mañana en Tokio el mayor centro del Instituto Cervantes de mundo -cuya biblioteca lleva el nombre del escritor granadino Federico García Lorca- como un paso más para difundir las lenguas y culturas de España en un país donde más de 400.000 personas estudian español.