Los etarras Asier Eceiza y Olga Comes, arrestados el pasado viernes cerca de la ciudad francesa Dijon, ingresaron hoy en prisión tras ser inculpados por diversos cargos, todos ellos agravados por el hecho de haber sido cometidos en asociación de malhechores con fines terroristas.

Fuentes próximas al caso indicaron a Efe que Comes, supuesta componente del comando Vizcaya de ETA, fue enviada a la prisión de Fleury-Mérogis, mientras que Eceiza, presentado como uno de los presuntos responsables del aparato militar de la banda, iba a ser confinado en Fresnes, otra cárcel de las afueras de París.

Antes de que un juez de las libertades y de la detención decidiera su ingreso en la cárcel, la magistrada antiterrorista de París Laurence Le Vert inculpó a ambos por receptación en banda organizada, de robo a mano armada, tenencia y transporte de armas y municiones, detención y uso de documentación falsa, uso de matrículas falsas y delito de fuga.

"Son hechos múltiples en vinculación con una acción terrorista", habían destacado fuentes de la Fiscalía al justificar su solicitud para ellos de prisión preventiva.

Los dos habían fueron arrestados el viernes en Arceau, cerca de Dijon, cuando intentaban escapar después de haber sufrido un accidente con un coche robado en el que se encontró una pistola, e inmediatamente dieron a los gendarmes que les capturaron sus identidades reales y dijeron ser miembros de ETA.

Dentro del coche, un Citroen C4 robado, se halló un revólver procedente de un atraco perpetrado por ETA en 2006 en las proximidades de Nîmes (sureste de Francia) en un almacén del que la banda terrorista sustrajo unas 350 armas.

La operación del viernes condujo al descubrimiento de una casa en la localidad de Montmançon, a una veintena de kilómetros al este de Dijon, que fue objeto de un registro el domingo en presencia de ambos etarras.

El propietario de la casa identificó a Comes como la mujer que visitó la vivienda para alquilarla desde comienzos de mes y que acudió con otro hombre que no era Eceiza, al que no ha reconocido.

La policía busca al menos a otros dos hombres, de los que se desconoce la identidad, que estuvieron en la casa de Montmançon y que, según el relato del casero, se marcharon la misma noche del viernes tras cargar en un coche objetos que hacían ruido metálico unas cinco horas después del arresto de la pareja.

Se investiga la presencia de los etarras en esa vivienda y su proximidad de pocos kilómetros a dos fábricas de explosivos en Vonges y Pontailler-sur-Saône para las que podrían haber estado preparando algún atraco.

Comandos de ETA habían robado a mano armada grandes cantidades de dinamita en Francia en octubre de 1999 en Bretaña (más de 8,3 toneladas) y en marzo de 2001 cerca de Grenoble (1,6 toneladas).

Además, las fuerzas del orden retiraron el lunes un automóvil del centro de Dijon que llevaba abandonado un tiempo y que había sido robado en enero en esa región del este de Francia, durante una acción a mano armada que se atribuye a un comando de ETA.

Como el vehículo estaba abandonado desde antes de la noche del pasado viernes, se ha descartado que fuera utilizado para huir por las personas que estuvieron hasta entonces en la casa de Montmançon.

A Eceiza, de 30 años, fuentes de la lucha antiterrorista española lo consideran un lugarteniente del jefe de los comandos de ETA, Garikoitz Aspiazu, "Txeroki", mientras que Comes podría haber participado en el seguimiento a un concejal socialista vasco al que la banda planeó secuestrar y asesinar.