El 'complejo Vizcaya', desarticulado ayer por la Guardia civil con la detención de su cabecilla, Arkaitz Goikoetxea, y otros ocho miembros legales de la banda, preparaba perpetrar muy pronto un atentado de "grandes dimensiones" en el País Vasco, concretamente en la localidad de Getxo. Así lo revelan las primeras investigaciones tras la operación de ayer que, según aseguró hoy el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, sigue abierta y en las próximas horas podría traer consigo nuevas detenciones".

"La Guardia Civil no descansa. La operación de detenciones va a continuar. No sólo hemos detenido a los culpables, sino que hemos evitado nuevos atentados. En los próximos días sabremos hasta qué punto es cierto esto", afirmó Rubalcaba durante la inauguración de una nueva Casa Cuartel de la Benemérita en San Agustín de Guadalix (Madrid).

De momento, la información obtenida tras las detenciones revela que cuando fueron arrestados los nueve miembros del 'complejo Vizcaya', autor de la mayoría de los atentados perpetrados por ETA tras la tregua, incluido el que costó la vida al guardia civil Juan Manuel Piñuel en el cuartel de Legutiano (Alava), preparaba un atentado de grandes dimensiones en el País Vasco.

Concretamente, los etarras preparaban un gran atentado en Getxo ---donde ayer fueron detenidos dos miembros de este comando, Iñigo Gutiérrez y Mikel Saracho-- que iban a perpetrar "muy pronto", aunque no de forma inmediata.

Además, en su discurso, Rubalcaba celebró el éxito de la operación para desarticular el 'comando Vizcaya', detrás del cual, según dijo, "está el trabajo, la profesionalidad y muchas horas de sacrificio de la Guardia Civil". "Tenemos unas excelentes fuerzas de seguridad. Hoy ha sido la Guardia Civil, ayer fue la Policía. Esto debe de nos unir, y por lo que nos tenemos que sentir satisfechos", concluyó.

"Cadena de funciones"

A la operación de ayer también se refirió el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, que también destacó que el operativo "sigue abierto" y destacó que las nueve detenciones de ayer y los registros practicados permiten a las Fuerzas de Seguridad del Estado continuar "trabajando en futuras operaciones".

"La idea que tiene que quedar muy clara es que la lucha antietarra es una cadena de operaciones, y todas están relacionadas", afirmó Camacho en declaraciones a RNE en las que insistió en que los detenidos ayer formaban "un complejo importante" como demuestra la entidad "del propio número uno de los detenidos" y especialmente si tenemos en cuenta "la vinculación a los atentados que se han cometido, tan graves como el de Durango, Legutiano o Calahorra".

Para terminar, el secretario de Estado de Seguridad afirmó que, al margen de las líneas de investigación que abra la operación de ayer una de las consecuencias relevantes es la detención y de nueve personas, "que habían complicado la vida a los ciudadanos", están ya a disposición policial.