Rajoy reiteró su oposición a la consulta de Ibarretxe desde Vitoria, donde se reunió con con cargos y afiliados de su partido en Euskadi, en un encuentro en el que también estuvo presente el vicesecretario territorial del PP, Javier Arenas, el candidato a presidir el PP vasco, Antonio Basagoiti y los presidentes del partido en Álava, Alfonso Alonso, y Guipúzcoa, Maria José Usandizaga. María San Gil no estuvo presente en el acto.

En una rueda de prensa, el presidente del PP tachó de "disparate" la consulta del lehendakari, una iniciativa que, además de que "no tiene nada que ver con las necesidades de los ciudadanos", únicamente genera "inestabilidad" e incrementa los problemas de la sociedad vasca. "Aquí no se necesita celebrar ningún referéndum, y menos si es manifiestamente ilegal", afirmó Rajoy, quien anunció que, a pesar de que el Gobierno ya ha iniciado los trámites para interponer su recurso contra la Ley de Consulta ante el Constitucional, con la petición del informe al Consejo de Estado, el PP seguirá adelante con su propia impugnación.

El líder del PP también se mostró en contra de una posible reforma estatutaria y aseguró que "no se necesita ningún cambio del Estatuto de Gernika", del que destacó que se trata de una norma "que ha unido a los vascos" y ha ofrecido a Euskadi "el mayor nivel de autogobierno de su historia.

En su intervención, Rajoy tampoco olvidó el decreto sobre el uso del euskera aprobado por el Gobierno vasco, una norma que calificó de "insultante". En este sentido, el líder del PP, que dijo no estar en contra de ninguna lengua, sino "a favor de la libertad", acusó al tripartito de "retroceder a la Edad Media" por "imponer" el euskera en la educación y en el comercio, por lo que expresó su apoyo al manifiesto en defensa del castellano.

MÁS UNIDOS QUE NUNCA

Ya en clave interna, Rajoy aseguró del Congreso del PP vasco que se celebrará en Bilbao los días 11 y 12 de julio saldrá "un partido más unido que nunca y más abierto a la sociedad", tras las situaciones "dolorosas" que han ocurrido en los últimos meses, como la renuncia de la todavía presidenta de los populares vascos, María San Gil, por su falta de "confianza" en el propio Rajoy.

Basagoiti, el candidato a sustituir a San Gil, coincidió en que éste ayude a que el PP "salga cohesionado y fortalecido tras unas complicadas circunstancias internas". En este sentido, aseguró que el PP "no va a renunciar a ninguno de sus valores, porque son el único camino para la libertad y porque ha habido compañeros que han sido asesinados por defender esos valores".