En concreto, la Ertzaintza está analizando los restos del artefacto para determinar los kilos de explosivo utilizado y su composición.

La explosión se produjo sobre a las tres de la madrugada en una de las plantas del edificio donde operan las rotativas del diario, ubicado en el polígono Torre Larragoiti, en la localidad de Zamudio (Vizcaya).

'El Correo' precisó que el artefacto había sido colocado "en el muro exterior, en la zona trasera del edificio" y la onda expansiva destruyó "un zócalo de hormigón de más de un metro de grosor que protege la fachada, además de derribar alrededor de cuarenta metros cuadrados del muro del edificio. Asimismo, afectó a parte del tejado del inmueble" y provocó la rotura de cristales en otros pabellones industriales, de las empresas Padel y Tubos Larrondo, situadas en las inmediaciones.

Medio centenar de trabajadores de la rotativa se encontraba allí en el momento de, la deflagración. Alrededor de las 5 de la madrugada los empleados pudieron regresar a sus puestos de trabajo.