El Gobierno se ha marcado como objetivo en esta legislatura garantizar la conexión directa a la alta velocidad ferroviaria al 55 por ciento de la población, frente al 40 por ciento que tiene este servicio en la actualidad.

De esta forma, en 2012, habrá 1.300 kilómetros de vía más y 30 ciudades conectadas directamente con la red de alta velocidad, once más que en este momento.