Las puntas de crecida del río Ebro a su paso por Navarra siguen sin superar los 2.000 metros cúbicos por segundo, previsión que se mantiene para las próximas horas, y el caudal de los ríos es estable e incluso va a la baja, según la información proporcionada por la Confederación Hidrográfica del Ebro a la Agencia Navarra de Emergencias (ANE).

El Ejecutivo foral ha apuntado al respecto en un comunicado que mientras persista la situación de la prealerta, el órgano de coordinación del Plan de Inundaciones ha requerido a la Policía Foral y al Centro de Control y Conservación de Carreteras para que vigilen con especial atención la red viaria.

También permanecerán en situación de preemergencia los recursos de la ANE, según dicha fuente, que ha precisado que, siguiendo el protocolo, los alcaldes de los municipios afectados así como los servicios de protección civil y las patrullas de medio ambiente reciben información sobre el estado de los ríos.