En caso de que en los planes de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, entre finalmente disputarle la Presidencia del PP a Mariano Rajoy, lo tiene complicado. Los influyentes barones populares de la Comunitat Valenciana y Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, cerraron hoy filas en torno al presidente del PP, al que consideran el único e indiscutible líder del partido de cara al próximo congreso de junio. Mientras, en Madrid, las aspiraciones de Aguirre se han transformado en una auténtica batalla mediática entre los afines a Gallardón y los cercanos a la presidenta de la Comunidad.
Curiosamente, los apoyos a la candidatura de Mariano Rajoy llegaron desde fuera de España. Gallardón se encontraba hoy en Pekin, a donde ha viajado para conocer de cerca la organización de los Juegos Olímpicos, y allí dejó claro que, de cara al Congreso Nacional del PP en junio "aunque haya otros candidatos" estará apoyando a Mariano Rajoy. "Y creo que no seré parte de una minoría", dijo.
Además, el alcalde de Madrid dejó claro que no quiere que Aguirre sea la nueva líder del partido; pero "el hecho que desde mi deseo y desde mi pronóstico no vaya a ser presidenta del PP no significa ni muchísimo menos que no tenga sitio en el PP, porque lo tiene", dijo.
La postura conciliadora de Gallardón no le impidió lanzar duras críticas contra la presidenta de la Comunidad, especialmente por las formas y el momento de hacer públicas sus aspiraciones. "Esperanza Aguirre ha ofrecido no una decisión, sino una indecisión sobre si iba a comunicar o no su candidatura", ironizó el alcalde, que añadió que "siendo en junio el Congreso y no teniendo semanas, sino meses de plazo para anunciar una decisión, el día menos adecuado para expresar su indecisión era el día anterior al debate de investidura del Gobierno". "Cualquier otro día habría sido no sólo más elegante, sino también más colaborador con Mariano Rajoy", reiteró Gallardón.
"Si la indecisa Esperanza Aguirre convierte su indecisión en decisión no será una candidatura que tenga el apoyo mayoritario de los militantes del PP", concluyó el alcalde de Madrid, que prefirió no secundar las palabras de su mano derecha, Manuel Cobo, que ayer consideró que la presidenta ha "montado un espectáculo".
Por su parte, desde Bruselas, el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, ante la alcaldesa de Valenciana, Rita Barberá, y el presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, tras participar en la reunión del Comité de las Regiones de la UE, en Bruselas, tampoco dudó en hacer público su apoyo a Mariano Rajoy.
Todo el PP con Rajoy
"Todo el PP de España está con Rajoy. A mí nadie me ha dicho otra cosa diferente. Y cuando digo todo el mundo es todo el mundo", sentenció Camps, que recordó que el "cien por cien" de los miembros del Comité Ejecutivo Nacional y de la Junta Directiva Nacional -en la que se encuentra Aguirre- "aclamaron en pie" a Rajoy cuando anunció su intención de seguir tras la derrota del 9-M. "Yo también me manifiesto personalmente al lado de la candidatura del presidente nacional, Mariano Rajoy", dijo por su parte la alcaldesa de Valencia, mientras que Valcárcel consideró al actual líder como la persona "adecuada" e "indicada" para seguir en la Presidencia del partido.
El evidente clima de enfrentamiento que se vive dentro del PP es una baza que el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, no podía dejar escapar. A juicio del dirigente socialisa, Aguirre está "amagando" y "ofreciendo un espectáculo lamentable" para ver si le dan "un puestecillo". Blanco, en declaraciones a TVE recogidas por otr/press, dijo compartir "la reflexión" de Gallardón, aunque añadió que lo que suecede es que "en el PP ya nadie confía en Rajoy" y que la discusión es entre unos que creen que "el momento de sustituir a Rajoy es ahora" y otros que opinan que "es después de las elecciones del 2011". "Pero nadie da un duro por Mariano Rajoy, eso es la verdad", remachó.
Al hilo de estas declaraciones, el vicepresidente primero del Gobierno de la Comunidad de Madrid y mano derecha de Aguirre, Ignacio González, señaló que "resulta habitual la coincidencia de planteamientos de Gallardón y Pepiño Blanco, lo cual no está mal", al tiempo que consideró sorprendente que el primer edil "hable de indecisión" cuando "todo el mundo ha vivido las decisiones del alcalde": "presentar a un tercero al Congreso regional" en el que Aguirre optaba a presidir el PP madrileño "para no hacerlo él" o decir que no encabezaría la candidatura al Ayuntamiento si la presidenta de la Comunidad de Madrid "ganaba el Congreso".
Gallardonistas vs. Aguirristas
En la misma línea, recordó que Gallardón amenazó con retirarse de la política si el líder del PP no le incluía en la lista del Congreso de los Diputados. "En definitiva, yo creo que algunos deberían ser más cuidadosos con algunas de sus declaraciones, sobre todo, cuando alguien dice públicamente, y a mí me parece bien, que su objetivo es ser presidente del Gobierno", indicó González, que criticó con dureza las palabras del número dos de Gallardón: "De apoyos en el PP y de espectáculos de ida y vuelta, Cobo sabe mucho". En cualquier caso, González señaló que no hay ningún inconveniente en presentar una candidatura alternativa a la de Rajoy sin tener el apoyo de los barones territoriales, ya que los votos "son individuales".
Por su parte, Cobo señaló que "todo el mundo sabe a qué juega" Aguirre, al tiempo que se reafirmó en sus declaraciones de ayer. "Me parece que es un espectáculo y que es de una inoportunidad manifiesta que desde la semana pasada hayan filtrado primero una comida, que luego diga que no se va a presentar, pero que si lo hiciera lo hará saber y que Francisco Granados (secretario general del PP de Madrid) diga que están buscando mimbres para ver si hacen o no una candidatura", criticó el vicealcalde, que consideró que "para lo que ha pasado esta semana no hay que repartir culpas, sino que hay una sola protagonista en un momento en que el protagonimos del partido debería haber correspondido nada más que al presidente".
En medio de este panorama de enfrentamiento interno, las palabras de la propia Aguirre casi pasaron desapercibidas. Las presidenta de la Comunidad de Madrid no quiso responder a las declaraciones de Gallardón y aseguró que lo que de verdad le interesaba era "abrir el debate ideológico", porque "a la gente en general lo único que le interesa son los nombres". "Les puedo asegurar que el único interés que yo no tengo es el personal", aseguró Esperanza Aguirre, que volvió a reiterar su idea de que "es importante que el PP dé la batalla ideológica al PSOE, porque nuestras ideas, valores y principios son superiores ética y moralmente a los del PSOE".
