En época de crisis cada vez son más los compradores que optan por internet para adquirir cualquier producto y servicio. El comercio online se impone a pasos agigantados al modelo tradicional. El cliente ahora conoce de antemano lo que busca y lo que quiere es encontrar la mejor oferta posible. España no es ajena a esta tendencia, según Internet World Stats nuestro país se encuentra entre los diez primeros países de Europa que más utiliza Internet, ocupando el séptimo lugar con 30,7 millones de internautas, por detrás de Alemania, Rusia e Inglaterra que encabezan la lista.

La sociedad europea está evolucionando progresivamente hacia un modelo de interacción a través de la red lo que ha permitido una comunicación directa entre usuarios para actividades como la compra online.Ha sido tal el impacto de la red que los nuevos modelos de negocio de comercio electrónico han llegado a asemejarse y combinarse, buscando así crear un sentimiento de comunidad y salir beneficiadas todas las partes. Antes de comprar se mira, se compara, se vuelve a mirar y se consulta. Según la revista Forbes se trata del negocio virtual que más crece, con portales como Groupon, LetsBonus, Planeo, Dscuento, Offerum,etc donde se puede encontrar opiniones e información acerca de las rebajas, promociones u ofertas de las grandes marcas de moda, todas ellas reunidas en un solo sitio, lo que facilita la decisión de compra. Ya no sólo se busca una única tienda online, se busca un site que las agrupe y gente que opine sobre ellas, por lo que se gana tiempo y poder de decisión.

Otras formas de mercadear aparecen a rebufo de estas con los portales de venta privada, entre otros. Ejemplos de ello son Privalia u Ofertix, que trasladan el modelo de compra outlet a la red. El outlet se consolida en la red . El funcionamiento de estas páginas es simple: actúan como intermediarios entre clientes que buscan los precios más bajos y empresas que ofrecen sus stocks de última hora a los que no han conseguido dar salida. Las empresas aportan descuentos exclusivos a estos portales que les publicitan y les envían clientes directos, llevándose un porcentaje de las ventas. Estas páginas se sirven de las nuevas formas de compra que empezaron ya hace años con las marcas low-cost, y le han añadido, la cada vez más de moda, necesidad de comunicación en comunidad que empezó con las redes sociales. Pero no sólo salen beneficiadas las grandes empresas. Para las pequeñas empresas, estos descuentos obtenidos por modelos de comprar colectivas pueden suponer la salvación de su negocio en esta época de crisis, donde además encuentran en Internet un nuevo lugar donde poder vender, práctica que invididualmente muy pocas Pymes se lanzan a hacer. Y es que el hecho de compartir los gastos y el pedido con otras empresas en una situación similar ha provocado un incremento del 25% de las compras totales de la platarforma de compra Join2Buy, la cual ha analizado el tema. Estaríamos entonces delante de una nueva forma de cooperativismo que une a pequeños comerciantes que de otro modo no podrían disfrutar de esta catapulta que aúna necesidades comunes y permite expandir sus respectivos negocios.

Los españoles están cambiando sus hábitos de consumo de eso no hay duda, decantándose cada vez más por este nuevo modelo en vez de la compra en tiendas físicas. Prueba de ello es que comercio electrónico mundial ha crecido un 27,7% en el último trimestre, manejando un volumen de negocio de 2.421 millones con 32,6 millones de transacciones realizadas en total. Las cifras no engañan, estamos ante una revolución comercial: el cooperativismo