El PP puso el broche final a su campaña destacando la mejor baza con la que cuentan en Galicia: que su candidato a la Presidencia es de la tierra. Así, su cabeza de cartel al Congreso por Pontevedra, Ana Pastor, culminó los quince días de intensa campaña resaltando que contar con "un gallego en la Moncloa no es algo menor". "Es tener la seguridad de que conoce Galicia, de que prioriza Galicia y de que va a seguir trabajando por Galicia", enfatizó y contrapuso a Rajoy con el resto de aspirantes, "de palabras vacías, porque no saben qué contar" sobre la comunidad.

Lo hizo ante un auditorio del Centro Social Afundación lleno -con medio millar de personas-, donde contó con el respaldo del vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda; el conselleiro de Economía, Francisco Conde; el subdelegado del Gobierno en Galicia, Antonio Coello; o los ex alcaldes populares de Vigo, Corina Porro y Manuel Pérez; entre otros cargos del PP.

A los que piden un cambio, la ministra de Fomento les respondió que "el mejor ejemplo" de que un país "se puede cambiar de arriba a bajo" es Mariano Rajoy que "se encontró un país en la ruina" y revirtió la situación económica y evitó el rescate. Incidió en su "honorabilidad", su "educación" y en que "no pierde los papeles aunque le insulten", así como en que es "garantía de estabilidad, mesura y equilibrio. "Hay dos maneras de gobernar: desde la prepotencia y la chulería o desde la humildad y la responsabilidad", defendió.

Sacó pecho por la conexión y la estación del AVE, por la eliminación del peaje de vuelta en Pontevedra, por la trabajo en el puerto, por la autopista del mar o por "el mejor hospital de España", entre otras cuestiones. Reclamó al PSOE de Vigo que pida "perdón" en nombre de su partido por las sanciones por el tax lease.

Defendió que quién escoge la papeleta de su partido "sabe a quién vota", mientras que no sucede lo mismo con el resto. "Puedes poner la papeleta en un sitio y que acabe gobernando otro". Para ilustrarlo repasó algunos pactos tras las autonómicas y las municipales, como el de Extremadura, donde gobierna el PSOE y Podemos "juntos y revueltos" o del de Andalucía, donde Ciudadanos "apoya al gobierno de los ERE". También envió un mensaje a los suyos: "Solo nos ganan cuando los nuestros no se movilizan".

Tras participar en actos en las otras tres provincias gallegas, el presidente de la Xunta llegó al de Vigo -con hora y media de retraso- para clausurar el mitin de cierre de campaña. Alberto Núñez Feijóo también pidió "el voto para un gallego", que "conozca los problemas de Galicia", frente al "desinterés" del resto. "No estamos dispuestos a tener menos que los demás", advirtió y resaltó que el Gobierno de Rajoy invirtió "entre un 12% y un 14%" del presupuesto estatal en la comunidad. Llamó a no desaprovechar la oportunidad de tener un presidente gallego en "vacas gordas".

Destacó lo conseguido estos 4 años, pero advirtió que aún queda por hacer, como la renegociación de 400.000 millones de deuda". Animó a votar "un gobierno en el que confíen los que prestan el dinero".