El cierre de campaña supuso ayer un compendio de la estrategia que cada fuerza ha mantenido en las dos últimas semanas. Alberto Núñez Feijóo, el principal valor del PPdeG, volvió a realizar una última jornada con varias visitas y eligió A Coruña, Lugo, Ourense y Vigo, donde trató de descabalgar del sprint final a Ciudadanos para movilizar el voto antiizquierda. Para él, se trata de una "final a tres" entre PP y la previsible alianza de PSOE y Podemos, mensaje que reforzó el propio partido de Albert Rivera al anunciar por sorpresa que se abstendría tras los comicios para permitir el gobierno de la lista más votada, lo cual está por ver porque si la izquierda suma más que el PP, C's deberá mojarse y votar, no valdrá con abstenerse.

Estabilidad para seguir respirando tras cuatro años ahogados por la crisis o el riesgo de volver sumergir la cabeza en la incertidumbre. Este esquema fue reiterado ayer por el líder de los populares gallegos. " Toca intentar que haya un gobierno, un gobierno estable, que dé seguridad y confianza, un gobierno que gobierne, que tenga un proyecto que dure toda la legislatura. Hay solamente dos posibilidades, o bien se le confía ese gobierno a mareas de Podemos y al PSOE, o bien se le confía ese gobierno al PP", declaró antes de esgrimir como un "plus" el sentar a un gallego como jefe del Consejo de Ministros.

Besteiro tampoco se salió del guión. Solo existe un "referente del cambio seguro y responsable" para relevar a Rajoy y al partido que vincula a los recortes y la desigualdad: el PSOE. El secretario xeral de los socialistas gallegos también protagonizó cuatro actos: un tramo del Camino de Santiago, un encuentro con ganaderos y mítines en As Pontes y Lugo.

Él también recurrió al miedo para evitar la fuga de votantes a En Marea al dispersar las ganas de cambio. "Que la gente no tome falsos atajos por la izquierda o la derecha, que pueden llevar al lobo, que es el PP", sostuvo. Y directamente se lanzó a por lo indecisos, un 40% cuando comenzó la campaña según el CIS: "Piensen al votar en todo aquello en lo que no piensa la derecha".

En Marea celebró varios actos de sus candidatos durante la jornada antes del mitin central de Vigo. En Pontevedra, la número 2 de la lista, Ángela Rodríguez, protagonizó un acto con maletas para protestar contra la emigración juvenil. En Santiago, Antón Gómez-Reino, candidato por A Coruña, clamó por el cambio. "El 15-M, desde la impugnación total al régimen del 78, abrió una ventana de oportunidad para cambiarlo", arengó.

Por su parte, NÓS-Candidatura Galega pidió no separar el cambio de la presencia gallega. "Hay muchos gallegos que tienen dudas entre cambiar el Gobierno del Estado o que Galicia tenga voz en Madrid. Con NÓS no tiene que renunciar a ninguna de las dos", garantizó Carlos Callón, en A Coruña.

Finalmente, Antonio Rodríguez, número 1 de Ciudadanos por A Coruña, apostó por un cambio desde el centro sin las estridencias de Podemos.